Traducción del artículo publicado en RADIO SPADA.
Bruno Forte es uno de los obispones de punta del ultraprogresismo
pseudocatólico, partidario de las rarezas más venenosas. Nombrado
arzobispón por Juan Pablo II y consagrado por el entonces card.
Ratzinger, Forte parece haber sido –entre otras cosas– el autor efectivo
de la controvertida Relátio post disceptatiónem (2014), en la cual se mostraba aprecio por los matrimonios civiles, las convivencias y las uniones homosexuales.
Justo ayer, Viernes santo, en solitaria procesión con el crucifijo en su
diócesis (Chieti) fue protagonista, marchando delante del camarógrafo
por la calle Marrucino, de un hecho curioso: el Cristo fijado sobre la
cruz –a las palabras Misericórdiam Tuam del Miserére– improvisamente se desclavó colgando de lado y cabeza abajo.
Agrega la agencia Ansa que intervino el único sacerdote que lo acompañaba, logrando fijar nuevamente la pequeña estatua luego de un par de intentos.
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+Jorge de la Compasión (Autor del blog)
Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)