LA ANTIMARÍA AL SERVICIO DE LA INMIGRACIÓN MASIVA

Noticia tomada de GLORIA NEWS. Comentario propio.

   

El sacerdote-presbítero jesuita italiano Felice Scalia (ordenado en 1947 con el Rito Romano tradicional) le regaló a Francisco Bergoglio el 10 de febrero la pintura de una niña que camina sobre el agua donde nadan personas y cadáveres.

   

  

La pintura realizada por Giuseppe Martino, de Messina (Sicilia), se llama Madonna di Porto Negato (María del Puerto Cerrado). Su intención es promover la inmigración masiva ilegal.

   

Martino reveló que “lloró” mientras pintaba a los moribundos en las olas del mar, mezclando así sus lágrimas con la pintura. Identificó a la mujer secularizada en su pintura como “María”.

   

El niño que sostiene “María” es Alan Kurdi, el niño sirio de tres años cuyo cuerpo apareció en la costa turca en 2015. Según Martino, el cadáver en primer plano “se crucificó en el mar”.

   

Que la gente muera en el mar Mediterráneo comenzó desde que la OTAN atacó Libia y derrocó al gobierno de Gadafi, quien hasta entonces había impedido a los traficantes de personas que enviaran a esas personas a la muerte.

  

COMENTARIO: La de Giuseppe Martino es una pintura fea, engañosa, pervertida y pasquinera, que se suma a las ofensas que la iconografía modernista hace contra la Santísima Virgen. A continuación, algunas muestras recientes (se recomienda a los débiles de estómago no mirarlas o, de hacerlo, tener una cubeta al lado):

   

   

Valga el espacio para anotar que la fotografía por la reportera turca Nilüfer Demir (que trabaja para la agencia de noticias DHA propiedad del conglomerado Demirören, afín al rais Recep Tayyip Erdoğan Mutlu) del niño Alan Shenu (publicitado en los medios oligárquicos como Aylan Kurdi) ha sido consecuencia de la guerra que Estados Unidos, la Unión Europea, Israel y su obra el Dáesh mueven desde 2011 contra el gobierno de Bashar al-Assad en Siria.