El sitio web Summorum-Pontificum.de publicó ayer 13 de Enero el siguiente apunte:
El telégrafo de la jungla romana, al que estamos conectados a través de varias estaciones, no siempre funciona de manera confiable, razón por la cual solemos retrasarnos un poco con la reproducción pública de los mensajes que recibimos de él. No todo vale la pena compartir: El hecho de que Arthur Roche, el jefe de la autoridad responsable de la liturgia, reaccionó a la noticia de la muerte de Benedicto con las palabras: «¡Ahora por fin podemos firmar el documento!» nos pareció, en el mejor de los casos, de interés anecdótico.Ahora nos llegan noticias sobre la forma y el contenido de este documento, y hacen sonar todas las alarmas. Luego se trata de una nueva Constitución Apostólica, con la que Francisco, extremadamente descontento con la lenta implementación de la Traditiónis Custódes, quiere finalmente poner fin a la antigua Misa. Francisco eligió la forma de una constitución apostólica para alinearse con la constitución correspondiente Missále Románum de Pablo VI y destacar la paridad de su normativa actual con la Ley de 1969.Según nuestra información, la constitución esperada contiene 4 decretos principales:
- En ninguna iglesia (¿diocesana?) se puede celebrar exclusivamente la misa antigua.
- En las iglesias (¿diocesanas?) no está permitido celebrar todos los domingos en el rito antiguo.
- El uso de los libros de 1962 (con las modificaciones ordenadas por Francisco) está permitido solo para la celebración de la Misa, no para la administración de los demás sacramentos y sacramentales.
- Todo
sacerdoteestá obligado a celebrar (¿públicamente?) según el Misal de Pablo VI.En cuanto al estado de nuestra información al 13 de Enero, estaremos atentos a las cosas y atentos al telégrafo.
Acá estaremos esperando ver las reacciones de los ex-Ecclésia Dei y la Fraternidad. Pero de nosotros los verdaderos católicos, aquí esta nuestra respuesta para ellos: «Ya no vale llorar. Os advertimos que eso iba a pasar, pero no quisisteis escuchar. Tarde o temprano, tendríais que adoptar el Novus Ordo en su totalidad, para estar en “comunión plena” con el Vaticano al que os rendisteis».
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+Jorge de la Compasión (Autor del blog)
Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)