En medio del servicio Novus Ordo en la iglesia de San Huberto, un distrito en la ciudad de Longueuil (Québec, Canadá), el youtuber de segundo orden Nabil Absi ingresó disfrazado de musulmán e hizo oración al modo islamico.
Absi le dijo al presbítero celebrante Edgar Geovany Sis Simón FMM (abajo; “instalado” el 21 de Mayo de 2010): «Excúseme, padre, no encuentro una mezquita, ¿puedo hacer la oración aquí? Este es un lugar santo», el cual le hizo seña de usar una nave lateral, donde extendió un tapete e hizo una inclinación (rakaa/رَكَعَ) y postración (sajada/سَجَدَ) diciendo «Alláhu akbar», luego de lo cual agradeció al presbítero celebrante y abandonó el sitio.
Nabil evidenció el poco y ningún respeto que la Iglesia Conciliar tiene a su Misa Novus Ordo, y que que por la declaración “Nostra Ætáte” del Vaticano II es cobarde, arrodillada y senil (en el servicio, el promedio de edad de los asistentes era de 72 años), porque su acto resultó impune. Si hubiese hecho su actuación en una sinagoga, o ingresado con una biblia o una cruz en una mezquita, ciertamente lo habrían salido del lugar en camilla. O esposado por “crimen de odio”, de cuenta del régimen izquierdista y anticristiano de Justin Trudeau-Castro Sinclaire.
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Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)