Traducción del Comentario de los Padres de TRADITIO.
La descripción de Luca Signorelli (1499-1502) de la resurrección de la carne (capilla de San Bricio, catedral de Orvieto).
En su Primera Epístola a los Corintios, San Pablo es el único que habla ampliamente sobre este dogma, dejando claro que esta resurrección involucra no un cuerpo mortal, sino un cuerpo glorificado e incorruptible.
«Queridos Padres de TRADITIO: En el Credo de los Apóstoles (Sýmbolum Apostolórum), donde la oración habla de la “resurrección de la carne”, ¿qué pasará con los santos incorruptos?» (Ronald).
RESPUESTA DE LOS PADRES DE TRADITIO: La denominada “incorruptibilidad” no es un requisito de santidad y es, en cualquier caso, solamente un fenómeno temporal, el cual puede ser adscrito a los procesos naturales de la muerte que son ampliamente variables. Solamente la Santísima Virgen María fue preservada de la corrupción del sepulcro, porque ella fue la única criatura inmaculada por especial gracia de Dios. San Pablo en su Primera Epístola a los Corintios (cap. XV, v. 42-44) deja en claro que la resurrección de la carne involucra no un cuerpo mortal, que se ha convertido en polvo, sino un cuerpo glorificado e incorruptible. El Apóstol no da los detalles, ni deberíamos nosotros estar fijados en ello con un tipo de macabra obsesión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios deberán relacionarse con el artículo. Los administradores se reservan el derecho de publicación, y renuncian a TODA responsabilidad por el contenido de los comentarios que no sean de su autoría. La blasfemia está estrictamente prohibida, y los insultos a la administración es causal de no publicación.
Comentar aquí significa aceptar las condiciones anteriores. De lo contrario, ABSTENERSE.
+Jorge de la Compasión (Autor del blog)
Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)