Con motivo del 10.º aniversario de Laudato Si’, León XIV Riggitano-Prévost ha celebrado hoy en el Centro Internacional Mariápolis de Castel Gandolfo una conferencia ecológica llamada “Raising Hope for Climate Justice” (Brindar esperanza por la justicia climática). Lo más destacado fue un ritual recién inventado llamado “Bendición de las Aguas”, organizada por el Movimiento Laudato Si’, en colaboración con el Dicasterio para el Desarrollo Humano Integral, Cáritas Internationális, la Cooperación Internacional para el Desarrollo y la Solidaridad, la Unión Internacional de Superioras Generales, el Movimiento Focolar y la Alianza de Redes Eclesiales para la Ecología Integral.
Durante esta ceremonia, se ordenó a los participantes (entre otros, el actor retirado y exgobernador de California Arnold Schwarzenegger y la ministra de Medio Ambiente y Cambio Climático brasileña María Osmarina Marina Silva y Silva de Vaz de Lima) que se pusieran de pie. A continuación, Riggitano-Prévost presionó su mano contra un bloque de hielo durante varios segundos mientras mantenía una expresión grave (minuto 1:15:00). Después, rezó para que Dios “bendijera las aguas” y por ellas «despierten nuestros corazones, purifique nuestra indiferencia, calme nuestro dolor y renueve nuestra esperanza». Mientras tanto, el hielo goteaba.
El bloque de hielo, procedente del fiordo Nuup Kangerlua cerca de Nuuk/Godthåb (capital de Groenlandia), fue transportado a Roma por el artista germano-islandés Ólafur Elíasson con el apoyo del geólogo danés Minik Thorleif Rosing Nielsen. Ambos colaboran en el proyecto Ice Watch, que, entre otras cosas, lleva grandes bloques de hielo a espacios públicos de las principales ciudades europeas, desde Copenhague hasta París, pasando por Londres, con el objetivo de hacer tangible la realidad de la crisis climática.
A continuación, tuvo lugar una emotiva actuación de la cantante británica Adeniké Adéwalé (protagonista del musical “Queen of the Night” dedicado a Whitney Houston), mientras se desplegaba una larga tela azul. Un hombre con plumas también formó parte de este espectáculo. Los cardenales y los participantes agitaron la tela de un lado a otro como niños de guardería. Nadie se rió.
Vea pues: Al Schwarzenegger le tocó recurrir a esta fantochada ambientalista porque ya nadie lo recuerda ni por la saga de “Terminator” (que irónicamente advertía de la inteligencia artificial) ni por esa película cutre de “El regalo prometido” que deben ahora descongelarla para Navidad. JAJAJAJA.
ResponderEliminarY de Marina Silva, vale preguntarle cómo compagina su pentecostalía (porque ella, que inicialmente quería ser religiosa para predicar la “Teología de la liberación” se hizo protestante en 1987, después de divorciarse de su primer esposo Raymundo de Souza y de casi morir de saturnismo) con la “religión ecologista”.