Traducción del artículo publicado por INVESTIGATORE BIBLICO.
INDICIO N. 219: “UN VERSO MUY ANTIGUO DE LOS HECHOS DE LOS APÓSTOLES, GRAVEMENTE OMETIDO EN LA BIBLIA CEI 74, BIBLIA CEI 2008 Y LA NUEVA VULGATA. ¿POR QUÉ FUE CANCELADO? UNA PREGUNTA PARA LOS COLEGAS BIBLISTAS” di INVESTIGATORE BIBLICOQueridos lectores, he aquí otra omisión en las Biblias CEI 74, CEI 2008 [ambas de la Conferencia Episcopal Italiana, N. del T.] y la Nueva Vulgata [la versión latina oficial del Vaticano modernista, N. del T.]. Precisamente un verso considerado muy antiguo. Aquí el problema no es si las distintas versiones de la Biblia reportan este verso o no. El problema es que los textos más antiguos lo presentan, mientras las versiones más recientes lo han cancelado completamente. Luego un neotraductor improvisado puede encontrar también 1000 versiones de la Biblia que no reportan este verso. Pero si los textos antiguos lo han reportado, ¿cómo fue cancelado después? Esta es la pregunta de fondo. He investigado sobre esto, y os puedo garantizar que no hay un criterio objetivo.Cuando hace varios años hice esta pregunta durante una conferencia de eruditos bíblicos, me respondieron que «son elecciones subjetivas, de los traductores de la época”. Sí, pero estas elecciones subjetivas afectan la santidad y la integridad de la Página Sagrada. Así que no la considero una respuesta exhaustiva. Si San Jerónimo insertó ese versículo, significa que tiene sentido. No estamos hablando de “Pierino la peste”. Estamos hablando de San Jerónimo.Como fuera, vamos al verso (HECHOS 8, 37) [Contexto: después que San Felipe Diácono, partiendo de Isaías 53, 7-8, le predica al eunuco –entendido como “ministro”– etíope sobre Nuestro Señor, este le pregunta si no hay impedimento para ser bautizado, N. del T.:
- CEI 74: “Omitido”.
- CEI 2008: “Omitido”.
- NUEVA VULGATA: “Omitido”.
- Vulgata: «Dixit áutem Philíppus: Si credis ex toto corde, licet. Et respóndens ait: Credo Fílium Dei esse Jesum Christum» [«Y Felipe dijo: si crees de todo corazón, licito es. Él repuso: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios» (Hechos 8, 37).
- Mons. Antonio Martini: «E Filippo disse: Se credi di tutto cuore, ciò è permesso. Ed egli rispose, e disse: Credo che Gesù Cristo è Figliuolo di Dio» [«Y Felipe dijo: Si crees de todo corazón, está permitido. Y él le responde, y dice: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios»] (Hechos 8, 37).
- Padre Giuseppe Ricciotti: «E Filippo rispose: “Se credi di tutto cuore, si può”». Ed egli attestò: “Credo che Gesù Cristo è il Figlio di Dio”» [«Y Felipe respondió: “Si crees de todo corazón, se puede”». Y él aseguró: “Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios”»] (Hechos 8, 37).
Ahora, no me parece un verso cualquiera. La Biblia de Jerusalén (CEI 74) escribe en la nota:«El v. 37 es una glosa muy antigua, conservada en el texto occidental que se inspira en la liturgia bautismal».¿Pero entonces por qué fue cancelado? Si es «una glosa muy antigua, conservada en el texto occidental» y precisamente «que se inspira en la liturgia bautismal», presente en la Vulgata de San Jerónimo, ¿por qué lo habéis cancelado? ¿Podemos tener una respuesta seria, no como la del relator del encuentro de biblistas arriba citado?¿Puede algún colega biblista darme una respuesta que con seguridad publicaré? ¿Por qué se eliminó este versículo tan importante?Investigatore Biblico
ADENDA (Por el traductor español):
En español, ocurre también esta situación (lista no exhaustiva):
- Biblia Platense (Mons. Juan José Straubinger): “Omitido”.
- El Libro del Pueblo de Dios (Levoratti-Trusso): “Omitido”.
- Biblia Conferencia del Episcopado Mejicano: “Omitido”.
- Biblia del Peregrino (Padre Luis Alfonso Schökel SJ): “Omitido”.
- Biblia Conferencia Episcopal Colombiana: “Omitido”.
- Biblia de Navarra: “Omitido”.
- Septuaginta en español (Padre Guillermo Jünemann Beckschäffer): «Y dijo Felipe: “Si crees de todo el corazón, lícito es”. Y, respondiendo dijo: “Creo que el Hijo de Dios es Jesucristo”» (Hechos 8, 37; en la edición publicada en Chile en 1992 el texto aparece entre paréntesis).
- Biblia Latinoamericana (Ricciardi-Hurault): «Felipe respondió: ‘Puedes ser bautizado si crees con todo tu corazón’. El etíope replicó: ‘Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios’» (Hechos 8, 37; el texto aparece entre paréntesis).
- Biblia Conferencia Episcopal Española: «Dijo Felipe: Es posible si crees de todo corazón: Respondiendo él, dijo: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios» (Hechos 8, 37; el texto aparece entre corchetes).
- Mons. Felipe Scío de San Miguel: «Y dijo Felipe: si crees de todo corazón, bien puedes. Y él respondió y dijo: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios» (Hechos 8, 37).
- Mons. Félix Torres Amat: «Ninguno [impedimento], respondió Felipe, si crees de todo corazón. A lo que dijo el eunuco: Yo creo que Jesucristo es el Hijo de Dios» (Hechos 8, 37).
- Biblia Nácar-Colunga: «Felipe dijo: Si crees de todo corazón, bien puedes. Y respondiendo, dijo: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios» (Hechos 8, 37).
- Biblia Bóver-Cantera: «Dijo Felipe dijo: Si crees de todo corazón, es posible. Respondiendo él dijo: Creo que Jesu-Cristo es Hijo de Dios» (Hechos 8, 37).
Si bien no somos biblistas ni teólogos, podemos postular la siguiente hipótesis: Desde que se permitió con la encíclica “Divíno Afflánte Spíritu” emplear los textos en los idiomas originales para las traducciones vernáculas de la Biblia en lugar de la Vulgáta latína como anteriormente, muchos traductores (en el caso español, desde la versión de Mons. Straubinger) han usado el Novum Testaméntum Græce et Latíne, la edición crítica de 1933 del padre Augustinus Merk Wilhelm SJ del Textus Recéptus, que fue la traducción latina de Erasmo de Róterdam del Nuevo Testamento a partir de siete manuscritos griegos de los siglos XII y XV INCOMPLETOS y ESCOGIDOS AL AZAR (dos prestados por el sacerdote y filósofo Juan Reuchlin Eck –heredero del cabalismo de Juan Pico de la Mirandola, perito en hebreo de Martín Lutero, y maestro y tío-abuelo materno de Felipe Schwartzerdt/Melanchton–, y los otros procedentes del convento dominico de Basilea. Y como datos de color, 1.º Erasmo siguió una versión posterior del Tipo textual bizantino –del cual se deriva la edición neotestamentaria ortodoxa del Patriarcado de Constantinopla de 1904– tan fragmentada que en muchas ocasiones tuvo que echar mano de la Vulgáta Latína que pretendía remplazar y crear para Apocalipsis XVII, 4 el genitivo singular ἀκάθαρτητος, “la inmundicia” en lugar de emplear el acusativo τὰ ἀκάθαρτα “las cosas inmundas”; y 2.º Para competir con la Biblia Políglota Complutense, la primera edición del Textus Recéptus, el “Novum Instruméntum omne”, fue publicada con tantos errores tipográficos que tuvo que corregirla en ediciones posteriores –de la segunda edición erasmista se valió Lutero para su traducción alemana; y de la tercera edición de Robert Estienne, muy similar a la cuarta y quinta edición erasmista, Teodoro de Beza para su traducción calvinista–) en la cual la confesión del ministro etíope (que había sido citada por San Ireneo, San Cipriano, San Ambrosio y San Agustín) es omitida y se pasa directamente al bautismo. Así lo reconoce Straubinger en su nota:
«Merk, cuyo texto traducimos, omite este versículo. Otros, como [Friedrich] Brandscheid, lo traen idéntico a la Vulgata, que dice: “Y Felipe dijo: si crees de todo corazón, licito es. Él repuso: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios”. Fillion observa que “su autenticidad está suficientemente garantida por otros testigos excelentes”. También el contexto parece requerirlo como respuesta a la pregunta del versículo 36, la cual sin él quedaría trunca, y entonces no se explicaría que el eunuco hiciese parar el carro (versículo 38) como pretendiendo recibir el bautismo sin conocer la conformidad de Felipe. En cuanto a la doctrina de este texto, según la cual “Felipe exigió del neófito una profesión exterior de fe antes de bautizarlo” (Fillion), es la misma de otros pasajes (cf. 2, 41 y nota). Es un caso más en que la fe se muestra vinculaba al conocimiento de la Palabra de Dios (versículo 35), según lo enseña San Pablo (Romanos 10, 17)».
Lo que conlleva necesariamente a que esta omisión sea un producto más del modernismo y otra consecuencia no deseada de la referida encíclica de Pío XII (además del nunca suficientemente anatematizable “Salterio de Bea”). Otro punto a favor de la Vulgáta Latína, la versión AUTÉNTICA de la Iglesia Católica Romana.
El tema se circunscribe a sucesivas traducciones bíblicas OFICIALES y LITÚRGICAS italianas, aunque siendo la Biblia de Jerusalén una versión presente en muchos idiomas y la Nueva Vulgata es la versión latina OFICIAL y LITÚRGICA del Vaticano modernista desde 1979, el problema se amplía, y merece ser investigado también en otros idiomas. A lo cual, incluimos un análisis nuestro de algunas ediciones españolas representativas:
ResponderEliminar• Biblia Platense (Mons. Straubinger): Primera traducción española según “Divíno Afflánte Spíritu” en la América Hispana, y usada por algunos tradicionalistas (es la que usa nuestro obispo en sus sermones).
• El libro del Pueblo de Dios (Levoratti-Trusso): Traducción litúrgica de la Conferencia Episcopal Argentina.
• Biblia Conferencia del Episcopado Mejicano: Versión litúrgica en uso en su país.
• Biblia del Peregrino (P. Luis Alonso Schökel SJ): Edición de lectura de la “Nueva Biblia Española” publicada por él y Juan José Mateos Álvarez SJ en 1975; una edición pastoral, “La Biblia de Nuestro Pueblo”, tiene edición española y otra para Hispanoamérica (con un tufo a “Teología de la Liberación”).
• Biblia Conferencia Episcopal Colombiana: Versión litúrgica en uso en su país.
• Biblia de Navarra: Basada en la “Nueva Vulgáta”, es la versión del Opus Dei.
• Septuaginta en español (Padre Guillermo Jünemann Beckschäffer): Primera traducción de la Biblia hecha en América, y además siguiendo totalmente el texto griego (aunque el Nuevo Testamento se publicó en 1928, y el Antiguo apenas se editó en 1992).
• Biblia Latinamericana (Ricciardi-Hurault): La versión favorita de la “Teología de la Liberación”, parece seguir a la letra el Manual de cómo NO traducir la Biblia.
• Bibla Conferencia Episcopal Española: Versión litúrgica en uso en su país.
• Biblia de Mons. Felipe Scío de San Miguel: Primera traducción completa al español desde la “Biblia Alfonsina” de 1280.
• Biblia de Mons. Félix Torres Amat: Primera traducción española en tener difusión, y la versión que usamos frecuentemente en esta tribuna.
• Biblia Nácar-Colunga: Primera traducción española según “Divíno Afflánte Spíritu”.
• Biblia Bóver-Cantera: Primera traducción crítica en español (aunque más católica que las “Biblias de Jerusalén” de 1998 en adelante).