Desde RELIGIÓN EN LIBERTAD tomamos esta noticia que si bien es antigua
(publicada originalmente en 2011), refleja la realidad sobre la
masonería: es adoradora y propagadora de la influencia de satanás.
Por LUIS DEL REAL ESPANYOL
Ricardo de la Cierva, historiador
El historiador Ricardo de la Cierva, uno de los principales y reputados expertos mundiales de la masonería, acaba de terminar su última investigación en la que demuestra la clara conéxión del satanismo con los masones de grado 33, el más elevado de esta sociedad secreta.
El Grado 33 de la masonería (Rito Escocés Antiguo y Aceptado) se llama
"Soberano Gran Inspector General", y representa la rebelión final contra
Dios, la Iglesia Católica y el Derecho Natural
De la Cierva señala que «no todos los masones son satánicos o diabólicos, pero todos los satánicos son masones».
Tras años de una exhaustiva investigación, de la Cierva descubre una conexión que hasta ahora estaba en una nebulosa, y que pocos eran los que se atrevían a aventurar esa alianza tan estrecha entre el grado superior de la masonería y el satanismo. Todo ello lo explica en «Masonería, Satanismo y Exorcismo» (Fénix).
Portada del libro "Masonería, Satanismo y Exorcismo" (Ricardo de la Cierva)
Los que ingresan son engañados
El historiador madrileño considera que «los masones, sobre todo al principio del ingreso en la orden, son sistemáticamente engañados por la Masonería. Los masones reciben una serie de engaños hasta que al final se les desengaña, pero ya en los últimos grados».
«La Masonería ha intentado con enorme insistencia proclamar que tan sólo es una fraternidad que realiza buenas obras. Tiene mucha gente dedicada a que no se sepa la verdad que se esconde tras esa fachada».
Testimonios de ex grados 33
De la Cierva ha tenido acceso a los testimonios de varios masones que fueron en su momento grado 33 y que por lo tanto han tenido una información vivencial de primera mano.
Uno de ellos, Jim Shaw, señala que «participó en una ceremonia masónica, llamada comunión negra, en el templo de rito escocés de Florida. Los participantes de la misma eran requeridos para referirse a Jesús como apóstol de la humanidad lo cual no está precisamente inspirado por la divinidad. Entonces, llegaron a burlarse de Jesús, practicando una extraña ceremonia negra».
El secreto de la Masonería
Otro ex masón de grado 33 es William Schmebeen, que tras abrazar de nuevo el cristianismo, desveló su desagradable experiencia en todos los años que estuvo en los grados más altos de esta sociedad secreta: «El secreto de la Masonería es éste. Como masón, usted podrá ser conducido a creer que los llamados secretos de la Masonería encierran una gran enseñanza y una gran utilidad. Este es el gancho. Estará obligado a realizar solemnes juramentos que luego se volverán contra su propia conciencia, como cristiano y su condición de americano».
Los juramentos realizados dentro de las ceremonias de la masonería son
en realidad la puerta para dejar entrar toda clase de maldiciones
espirituales y terrenales
«Estos juramentos y obligaciones –continua William Schmebeen– actuarán con el tiempo de manera muy negativa para usted. En algún punto se dará cuenta del porqué se le ha obligado a introducirse en la logia entre muchos misterios del ocultismo y sobre la estela de Satán, y no en la de Cristo. Cuando se percate de esto, tendrá su mente completamente ennegrecida por el mal. Los juramentos masónicos le harán conocer unos presuntos avances en la justicia, pero de manera diabólica podrá ser arrastrado hacia una Biblia, un compás y una escuadra que le llevarán a formular unos juramentos terribles que le obligarán a cumplir bajo penas que llegan hasta la muerte. Estos son juramentos extrajudiciales y, como tales, contrarios a las leyes de su país. Sin embargo, se verá obligado a mantenerlos si no quiere someterse a castigos terribles».
Lucifer y los grados superiores de la masonería
El pastor bautista Pierce Dodson manifiesta que «todo el corazón de la Masonería es luciferiano». Y de la Cierva apunta que «los masones de grados superiores creen que Lucifer realmente es Dios y se refieren a Yahveh por su nombre de Adonai. Los libros masonicos que se entregan a algunos miembros selectos de los grados 32 y 33 dicen que Jesús es un impostor y que Lucifer es el verdadero Dios».
El dios que adoran los masones y que quieren imponerle al mundo es lucifer-satanás el diablo-baphomet (todos esos nombres se refieren a lo mismo)
Secretas doctrinas de Lucifer
Otro ex masón, Manly Palmer, aparece en el libro para afirmar que «muchos candidatos a la Masoneria no tienen ni idea de que al llegar a la iniciación les serán comunicadas muchas mentiras, o que el corazón de los masones es un receptáculo de las secretas doctrinas de Lucifer, porque un masón está perdido en las tinieblas del tiempo».
Una pregunta, cuando se dice que en lugar de Yahve se le llama Adonai (hablando de que los masones adoran a Lucifer), ¿no está errado (es un ministro evangélico me parece quien lo afirma) a llegar a la conclusión de que se refiere a Lucifer? Tengo entendido que en el Génesis (original, no traducción) viene "adonai", que significa "el Señor" o "Los Señores". Y siendo el Génesis, pues se habla de Yahve, no de Lucifer, ¿podría aclarar ese punto? Gracias de antemano, fabuloso blog.
ResponderEliminarGracias por el cumplido. Nosotros nos esmeramos porque este blog tenga buenas lecturas, y sea siempre anunciada la Verdad.
ResponderEliminarBien dices que "Adonai" (o mejor, la raíz hebrea Adón) significa en hebreo "el Señor" o "Los Señores", pero en ese idioma, Adón es sinónimo de Baal (pero en el movimiento desde los Jueces, el nombre de Baal se asumió a los dioses de las naciones, en contra de Yahveh, el Dios de Israel).
Y en cuanto a su aparición en las Escrituras, es porque para los judíos, el Nombre de Dios es impronunciable, especialmente desde la Cautividad de Babilonia. Por eso suprimieron los signos vocálicos de Yahveh e impusieron los de Adonai (luego los traductores llegaron a concluir que el Nombre era Jehová, y el resto es historia), pero el Nombre de Dios en hebreo es Yahveh.
La única forma de saber la verdad es estando dentro, y llegando a grado 33. Lo demás es pura charlatanería. Shalaam hermanos.
ResponderEliminarNo necesariamente hay que esperar a tanto. Desde que alguien entra (o más, al pasar frente a las logias), ya se sabe lo que hay.
ResponderEliminarPor qué se dice al final que "un masón está perdido en las tinieblas del tiempo"
ResponderEliminarcreo que hay personas que se dedican a desacreditar a los masones.. tendrían que iniciarse como masón para saber realmente que es masonería y lo que en ella se estudia.. a mi parecer el autor del libro no se basa en ninguna prueba de lo que dice, y los testimonios ha saber si son verdaderos.. la masonería señores es el estudio filosófico del universo y de uno mismo..
ResponderEliminareso es satanismo y ya.
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