Como parte de los eventos de la “Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos” (en cuyo marco se dio la audiencia con Francisco Bergoglio de una delegación ecuménica finlandesa el 19 de Enero), la Comunión Anglicana anunció un servicio de Oración vespertina (Vísperas) en la Basílica de San Pedro el 23 de Enero (como ocurrió en Febrero de 2017) que será presidida por el Vicario anglicano en Roma.
El 25, el arzobispón cantuariense Justin Welby presidirá “la Cena del Señor, también llamada Misa” en la basílica de San Bartolomé en la Isla Tiberina (la primera vez después de la polémica en San Juan de Letrán). Poco después, en San Pablo Extramuros, Welby junto con su contraparte vaticana Francisco Bergoglio comisionará algunos obispones (el 13 de Noviembre de 2019, Welby usó la iglesia de San Ignacio de Loyola para instalar al arzobispón Gerald James Ian Ernest como representante personal ante la Santa Sede y director del Centro Anglicano de Roma).
Al día siguiente, visitará la basílica de San Andrés y San Gregorio Magno en el Monte Celio, desde donde su abad San Agustín de Canterbury fue enviado por San Gregorio Magno a restablecer la jerarquía eclesiástica en Inglaterra en el 595 (desde la caída de Roma y las invasiones anglosajonas, la Iglesia en Inglaterra había adoptado la organización en abadías y no en diócesis, siguiendo el modelo irlandés).
Welby pudo usar perfectamente la iglesia de Todos los Santos en Campo Marzio (perteneciente a la diócesis de Gibraltar en Europa de la Comunión Anglicana) para todo lo que quiera hacer en su agenda, pero quiso imitar a su antecesor Rowan Williams, quien el 26 de Noviembre de 2006 (reinando el conservador Benedicto) presidió el servicio anglicano en la basílica de Santa Sabina, la iglesia central de los dominicos. Para más inri, como representación del Vaticano estuvieron el obispón Brian Farrell LC (secretario del Dicasterio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos desde 2003) en hábito coral y el presbítero Donald Joseph Bolen Ehmann (actualmente arzobispón de Regina, Canadá), el cual leyó el Evangelio después de recibir la “bendición” de Williams (Dátolo “innecesario”: Fue la primera vez en 38 años que los dominicos vieron juntar los dedos que tocan la hostia y de oír el “pro multis” en la consagración –que tampoco existe en los anglicanos–).
En 1896, no obstante los esfuerzos e intrigas del anglicao Lord Halifax y su agente el sacerdote lazarista francés Fernand Portal Lafabrie (respaldado por el cardenal Rampolla), el Papa León XIII promulgó la encíclica “Apostólicæ Curæ”, donde declaró ex cáthedra que las órdenes en rito anglicano son NULAS E INVÁLIDAS por defecto en la intención y alteración en la forma, y por consecuente, los sacramentos y ceremonias oficiadas en ese rito.
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Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)