Vexílla Regis

Vexílla Regis
MIENTRAS EL MUNDO GIRA, LA CRUZ PERMANECE

LOS QUE APOYAN EL ABORTO PUDIERON NACER

LOS QUE APOYAN EL ABORTO PUDIERON NACER
NO AL ABORTO. ELLOS NO TIENEN LA CULPA DE QUE NO LUCHASTEIS CONTRA VUESTRA CONCUPISCENCIA

NO QUEREMOS QUE SE ACABE LA RELIGIÓN

NO QUEREMOS QUE SE ACABE LA RELIGIÓN
No hay forma de vivir sin Dios.

ORGULLOSAMENTE HISPANOHABLANTES

ORGULLOSAMENTE HISPANOHABLANTES

domingo, 2 de febrero de 2020

¿LA PRÓXIMA EXHORTACIÓN AMAZÓNICA ABOLIRÁ LA OBLIGATORIEDAD DEL CELIBATO?

Fotograma de la película italiana “La mujer del cura” (año 1970)
     
Por infidencias hechas por algunos obispos a Roberto de Mattei en Corrispondenza Romana (reproducidas también por Aldo Maria Valli), parece que en la exhortación post-sinodal de próximo lanzamiento, se reproducirá sustancialmente el parágrafo 111 aprobado en el documento conclusivo del Sínodo Panamazónico, donde se dice:
«Muchas de las comunidades eclesiales del territorio amazónico tienen enormes dificultades para acceder a la Eucaristía. En ocasiones pasan no sólo meses sino, incluso, varios años antes de que un sacerdote pueda regresar a una comunidad para celebrar la Eucaristía, ofrecer el sacramento de la reconciliación o ungir a los enfermos de la comunidad. Apreciamos el celibato como un don de Dios (cf. Sacerdotális Cœlibátus, 1) en la medida que este don permite al discípulo misionero, ordenado al presbiterado, dedicarse plenamente al servicio del Pueblo Santo de Dios. Estimula la caridad pastoral y rezamos para que haya muchas vocaciones que vivan el sacerdocio célibe. Sabemos que esta disciplina “no es exigida por la naturaleza misma del sacerdocio” (PO 16), aunque tiene muchas razones de conveniencia con el mismo. En su encíclica sobre el celibato sacerdotal san Pablo VI mantuvo esta ley y expuso motivaciones teológicas, espirituales y pastorales que la sustentan. En 1992, la Exhortación Apostólica postsinodal de san Juan Pablo II sobre la formación sacerdotal confirmó esta tradición en la Iglesia latina (cf. PDV 29). Considerando que la legítima diversidad no daña la comunión y la unidad de la Iglesia, sino que la manifiesta y sirve (cf. LG 13; OE 6), lo que da testimonio de la pluralidad de ritos y disciplinas existentes, proponemos establecer criterios y disposiciones de parte de la autoridad competente, en el marco de la Lumen Géntium 26, de ordenar sacerdotes a hombres idóneos y reconocidos de la comunidad, que tengan un diaconado permanente fecundo y reciban una formación adecuada para el presbiterado, pudiendo tener familia legítimamente constituída y estable, para sostener la vida de la comunidad cristiana mediante la predicación de la Palabra y la celebración de los Sacramentos en las zonas más remotas de la región amazónica».
    
Se hablaría –en lo que parece– de una norma “experimental” en el clero de rito latino de la Amazonía. Si bien, en el ámbito de un Sínodo claramente panteísta y apóstata como el Amazónico, la cuestión del celibato (que en la óptica de los modernistas es la antecámara a la destrucción protestante del Sacerdocio, ¡leer la Pascéndi de San Pío X para creer!) sea una de las últimas por importancia y gravedad donde esta noticia fuese confirmada se trataría ciertamente de un hecho no ocultable. Una derrota netíisima del frente “conservador”.
  
COMENTARIO:
Traemos a recordar un texto que para muchos en el ambiente “conservador” y “neoconservador” es olvidado:
Antipapa Benedicto XVI, Constitución Apostólica Anglicanórum Cœ́tibus (4 de Noviembre de 2009), art. VI § 2: «El Ordinario [personal], observando plenamente la disciplina sobre el celibato clerical en la Iglesia latina, pro régula admitirá sólo a hombres célibes al orden del presbiterado. Podrá pedir al Romano Pontífice, en derogación del canon 277 § 1 [“Los clérigos están obligados a observar una continencia perfecta y perpetua por el Reino de los cielos y, por tanto, quedan sujetos a guardar el celibato, que es un don peculiar de Dios mediante el cual los ministros sagrados pueden unirse más fácilmente a Cristo con un corazón entero y dedicarse con mayor libertad al servicio de Dios y de los hombres”], que admita caso por caso al orden sagrado del presbiterado también a hombres casados, según los criterios objetivos aprobados por la Santa Sede».
O sea, Bergoglio no hace sino ensanchar la pasarela tendida por su antecesor Ratziniger Tauber. Y en general, sigue las huellas de los modernistas:
«Durante su conferencia conclusiva del Simposio de las Conferencias Episcopales de Europa, tenida en Coira (Suiza) entre el 7 y el 10 de Julio de 1969, el cardenal Leo-Joseph Suenens, leyó un apelo de Hans Küng, para suprimir el celibato de los sacerdotes. Esta petición era coherente con el rol reconocido por la teología progresista a la sexualidad: un instinto que el hombre no debía reprimir por la accesis, sino “liberar”, encontrando en el sexo una forma de “realización” de la persona humana. Entonces esa petición fue alargada, acompañándose con el proceso de secularización y autodemolición de la Iglesia».
Pero, igualmente no se debe perder de vista que entre los modernistas, el sacerdocio sacrificial NO EXISTE porque fue adulterado el rito de ordenación en 1968 por Montini, creándose en cambio un presbiterado laico que preside la cena comunal (el mismo Bergoglio, por ejemplo, NI SIQUIERA ES SACERDOTE CATÓLICO).

1 comentario:

  1. https://www.lanacion.com.ar/politica/roma-alberto-fernandez-su-comitiva-arrancaron-dia-nid2329331

    wakala no dejen de leer los comentarios....

    ResponderEliminar

Los comentarios deberán relacionarse con el artículo. Los administradores se reservan el derecho de publicación, y renuncian a TODA responsabilidad por el contenido de los comentarios que no sean de su autoría. La blasfemia está estrictamente prohibida, y los insultos a la administración es causal de no publicación.

Comentar aquí significa aceptar las condiciones anteriores. De lo contrario, ABSTENERSE.

+Jorge de la Compasión (Autor del blog)

Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)