FRANCESES ENOJADOS POR EXIGENCIA DE QR PARA ENTRAR A LA CATEDRAL DE PARÍS

Traducción del Comentario de los Padres de TRADITIO.

  

A los neoiglesianos franceses se les dijo que no pueden entrar a orar en la catedral de Nuestra Señora de París a orar.

Desde que se ha vuelto una mera trampa para turistas, nadie puedr entrar, ni siquiera a orar, sin un código QR; ¡la mayoría de los franceses no tienen ni idea de qué es eso!

   

Las noticias falsas han otorgado a la “actualización” modernista de la catedral de Notre Dame de París, destruida por el fuego el Lunes Santo de 2019, el elogio izquierdista habitual para cualquier cosa que destruya el verdadero catolicismo. Pero se han filtrado las historias de clérigos, artistas, y franceses de a pie condenando abiertamente la “reconstrucción” del Vaticano II. Se le mintió a los franceses. Se les dijo que su dinero iría a restaurar la catedral del siglo XII a su estado original antes del incendio. En cambio, fue sometida a una “reconstrucción” del Anticoncilio Vaticano II.

En su lugar, le dijeron al pueblo francés que no podrían entrar a la catedral sin un código QR. Muchos de ellos ni siquiera tienen idea de qué sea un código QR. Los abucheos resonaron a lo largo de la Isla de la Ciudad, donde se yergue la gran catedral medieval. Un anónimo altavoz disparaba: «Si no tenéis un código QR, no podéis entrar». El presbítero Olivier Ribadeau-Dumas y Ribadeau-Dumas, rector y arcipreste de la catedral, le mintió previamente a los franceses diciendo: «Siempre habrá una fila en la explanada exterior» [Parte de la información para este Comentario proviene del Telegraph del Reino Unido].

Católicos tradicionales, los franceses que estaban afuera, incluidos muchos ancianos neoiglesianos, prácticamente atropellaron a los guardas de seguridad enojados por el “mandato” neoiglesiano y del régimen Macron. Ellos dicen que la gran catedral ya no es un monumento religioso, sino que es ahora una mera trampa para turistas. Aquellos que querían entrar para decir unas pocas plegarias siempre habían tenido prioridad para entrar y salir cuando quisieran, pero ahora la nueva tecnología empleada por la Iglesia Conciliar lo hace imposible. Ahora solo se puede orar si se tiene un código QR. No sorprende que los franceses estén abandonando en masa la Iglesia Deuterovaticana y vayan por todo el país demoliendo cualquier iglesia que en otrora llevase el nombre de “católica”.