El nuncio en Lituania, Estonia y Letonia, y exsecretario privado de Benedicto XVI Ratzinger, Georg Gänswein Gromann, dio una entrevista al suplemento dominical de la revista amarillista alemana Bild en la sede de la Nunciatura en Vilna (Lituania).
Gänswein contó que le tocó decidirse entre el presbiterado y Gaby Schätzle, una novia que tuvo en su natal Riedern am Wald: «Llevábamos juntos dos años cuando decidí matricularme en el seminario de Friburgo».
«Estábamos juntos todo el tiempo. Hacíamos muchas cosas, nos reíamos mucho, nos divertíamos. Y por supuesto nos besábamos. No pasó nada más, eran otros tiempos», añadió al contar un episodio que la mayoría de personas guardaría para sí mismas.
Gänswein y Schätzle rompieron cuando él estaba estudiando teología, lo que fue «muy doloroso para él», hasta el punto que no se vieron en muchos años. Tiempo después, cuando él bautizaba a un sobrino, se encontró con la hija de su exnovia, quien se casó y tuvo tres hijos.
No todo fueron recuerdos de un viejo amor (que ya había contado antes en Bunte, la revista de farándula más popular de Alemania, y su similar italiana Grazia). Gänswein dijo a Bild que se sintió maltratado por Francisco Bergoglio al verse echado del Vaticano:
«En el pasado siempre se daba el caso de que al secretario del Papa se le daba otro trabajo, idealmente como cardenal. Y a mí me dijeron: “Vas a volver a Friburgo”. Fue una herida muy amarga y profunda para mí. Fue un shock. Prácticamente me echaron de la Corte».
Posteriormente, se reconciliaron Bergoglio y Gänswein, y se reunieron (por última vez) en Noviembre de 2024. Gänswein concluyó su relato de esa época diciendo: «Parte de lo que salió en la prensa fue exagerado. Yo y todos tenemos que servir al Papa, sea quien sea y haga lo que haga», defendiendo el controvertido concepto de la obediencia cadavérica, jesuítica, que tanto daño ha causado a la Iglesia.
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+Jorge de la Compasión (Autor del blog)
Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)