En China hubo elección de obispones en las diócesis de Shanghái y Xinxiang, sin obstarle el hecho que no se haya elegido un sucesor al fallecido Francisco Bergoglio, informó Asia News.
El día 29 de Abril, los presbíteros, religiosas y fieles de la diócesis de Shanghái fueron convocados para aprobar la elección del presbítero Ignacio Wu Jianlin (依納爵 吴建林), vicario general diocesano, como nuevo obispón auxiliar, el cual fue elegido con solo unos pocos votos en contra.
Al día siguiente, el presbítero Francisco Li Jianlin (濟各 李建林) fue elegido obispón de la prefectura apostólica de Xinxiang. Fue el único candidato que se presentó.
En Shanghái, Wu (que había sido administrador diocesano sede vacánte entre 2013 y 2023, y miembro de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino) fue postulado por el obispón José Shen Bin, presidente de la Conferencia Central de Obispos Católicos de China. Shanghái tiene dos obispones auxiliares, que a los efectos son como si no tuvieran ninguno: José Xing Wenzi (62 años, “instalado” el 28 de Junio de 2005 por el “obispón patriótico” Alfonso Jin Luxian SJ, pero renunció a funciones desde 2011 y en paradero desconocido desde entonces) y Tadeo Ma Daqin (57 años, desde 2012 vive en prisión domiciliaria en el Seminario de Sheshan por renunciar públicamente a la Asociación Patriótica de Católicos Chinos luego de su “instalación” el 7 de Julio de ese año).
El caso de Xinxiang es particular: Su obispón residente es José Zhang Weizhu (若瑟 张维柱), de 67 años e el 27 de Octubre de 1991, pero que ha sido arrestado en varias ocasiones por ser parte de la Iglesia clandestina (la última vez fue en 2021, y no se sabe nada más de él). En 2018, Li fue uno de los firmantes de una circular prohibiendo la entrada de menores a las iglesias de la provincia de Henan.
La elección de Ignacio Wu Jianlin y Francisco Li Jianlin fue una bofetada adicional al cadáver de Bergoglio (no obstante la última intercesión general en el funeral se pronunció en chino), ante el cual el gobierno de Pekín no envió ni una sola delegación, y la nota necrológica publicada el 22 de Abril fue bajada pocos días después del sitio web de la Asociación Patriótica y sustituida por noticias relativas a reuniones entre católicos y el Comité del Partido en Hanui, así como al presupuesto del Plan Quinquenal para la sinización del catolicismo en Hubei (extraoficialmente, se comenta que fue en retaliación por la negativa del Vaticano a excluir de las honras fúnebres a la delegación de la “provincia rebelde” de Taiwán). Y en la diócesis de Wenzhou (cuyo obispón clandestino Pedro Shao Zhumin sigue detenido en paradero desconocido), los presbíteros de la Asociación Patriótica tuvieron prohibido simularle siquiera una Misa de la Resurrección.
El Partido Comunista Chino y el Vaticano suscribieron un Acuerdo secreto provisional para el nombramiento de obispones en el año 2018, y ha sido renovado tres veces en 2020, 2022 y 2024 (esta última por cuatro años), gracias a/por culpa de las gestiones oficiales del Secretario de Estado Vaticano, Decano de facto del Sacro Colegio Cardenalicio y principal candidato en el cónclave Pietro Parolin Miotti (y las ídem debajo de cuerda por el entonces cardenal Theodore McCarrick).
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Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)