Traducción del comentario de los Padres de TRADITIO.
El obispo conciliar local ha
declarado que las “apariciones” de Medjugorje son un fraude: “La Virgen
no se ha aparecido en Medjugorje”.
Las apariciones centradas en “secretos” contradicen la enseñanza de Nuestro Señor Jesucristo, que dijo: “He hablado abiertamente al mundo, y nada he dicho en secreto”.
Las apariciones centradas en “secretos” contradicen la enseñanza de Nuestro Señor Jesucristo, que dijo: “He hablado abiertamente al mundo, y nada he dicho en secreto”.
La
noción de que hay “apariciones” que contienen “secretos” que son
necesarios para los Católicos recuerda a la temprana herejía del
gnosticismo, que ha sobrevivido hasta nuestros tiempos.
Incluso
el obispo conciliar local que dirige Medjugorje declaró el 26 de
Febrero de 2017, sobre las notorias “apariciones” en esa ciudad bosnia:
“La Virgen no se ha aparecido en Medjugorje”. Él declaró que las
alegadas apariciones marianas en el lugar son un fraude. Las supuestas
apariciones comenzaron originalmente el 24 de Junio de 1981, cuando seis
niños (Vicka Ivanković, Mirijana Dragičević, Marija
Pavlović, Ivan Dragičević, Ivanka Ivanković y Jakov Čolo) residentes en
Medjugorje, una ciudad que ahora es parte de la república de
Bosnia y Herzegovina, afirmaron haber experimentado fenómenos que ellos
dijeron ser de la Bienaventurada Virgen María. Esas “apariciones” se
dice que han continuado casi diariamente desde la primera vez, con tres
de los seis niños originales (Ivan, Vicka y Marija), que ahora son
adultos, los cuales continúan recibiendo apariciones cada tarde porque
no todos los “secretos” confiados a ellos han sido revelados.
Según los seis “videntes”, las “apariciones” contienen ciertos secretos sobre eventos que se cumplirán en el futuro. La noción de tales “secretos” contradice la enseñanza de Nuestro Señor Jesucristo, que dijo: “He hablado abiertamente al mundo... y nada he dicho en secreto” (Juan 18, 20). La noción de que hay “apariciones” que contienen “secretos” que son necesarios para los Católicos recuerda a la temprana herejía del gnosticismo, que ha sobrevivido hasta nuestros tiempos.
El obispo conciliar Ratko Perić Raguž, titular de la sede Mostar-Duvno (de la cual depende la parroquia mesoropolitana) declaró que las supuestas apariciones no son nada más que una manipulación de los “videntes” y los presbíteros Novus Ordo que trabajan con ellos. Él apunta los errores e inconsistencias entre las declaraciones de los “videntes”, e incluso comportamientos impensables ante la verdadera Virgen María (risa extraña, tocamientos a la aparición, desaparición ante algunas preguntas y reaparición en otras). El 10 de Abril de 1991, los obispos de la antigua Yugoslavia determinaron en la Declaración de Zadar (actual Croacia) que “con base en la investigación hasta ahora realizada, no es posible establecer que hubo apariciones o revelaciones sobrenaturales”. A partir de estos hallazgos, la deuterovaticana Congregación para la Doctrina de la Fe decretó el 21 de Octubre de 2013 que el clero y los laicos “no tienen permitido participar en reuniones, conferencias, o celebraciones públicas en las cuales la credibilidad de tales ‘apariciones’ se dé por afirmada”. [Parte de la información para este Comentario proviene de Catholic News Agency].
Verdaderos Católicos, las falsas apariciones son solo una de las formas en que los fieles conciliares (por no hablar de algunos tradicionalistas) están permitiendo a sus almas ser envenenadas, apartándolas de la Sagrada Escritura de Cristo y la Sagrada Tradición (las cuales son los dos fundamentos de la Fe Católica y la Revelación Pública) hacia especulaciones sobre los “secretos”. Aunque en Lourdes no se presentaron tales especulaciones, en Fátima ciertamente sucedió, llevando a muchos a desviarse de la Fe Católica hacia una suerte de “fatimismo” extremo, que herética y blasfemamente equipara los mensajes de Nuestra Señora de Fátima con la Sagrada Escritura, justo como advirtiera el gran místico de la Iglesia, San Juan de la Cruz: “Apártate de las visiones, apariciones y milagros tanto como puedas. Ten cuidado con las visiones aún cuando sean auténticas”.
Según los seis “videntes”, las “apariciones” contienen ciertos secretos sobre eventos que se cumplirán en el futuro. La noción de tales “secretos” contradice la enseñanza de Nuestro Señor Jesucristo, que dijo: “He hablado abiertamente al mundo... y nada he dicho en secreto” (Juan 18, 20). La noción de que hay “apariciones” que contienen “secretos” que son necesarios para los Católicos recuerda a la temprana herejía del gnosticismo, que ha sobrevivido hasta nuestros tiempos.
El obispo conciliar Ratko Perić Raguž, titular de la sede Mostar-Duvno (de la cual depende la parroquia mesoropolitana) declaró que las supuestas apariciones no son nada más que una manipulación de los “videntes” y los presbíteros Novus Ordo que trabajan con ellos. Él apunta los errores e inconsistencias entre las declaraciones de los “videntes”, e incluso comportamientos impensables ante la verdadera Virgen María (risa extraña, tocamientos a la aparición, desaparición ante algunas preguntas y reaparición en otras). El 10 de Abril de 1991, los obispos de la antigua Yugoslavia determinaron en la Declaración de Zadar (actual Croacia) que “con base en la investigación hasta ahora realizada, no es posible establecer que hubo apariciones o revelaciones sobrenaturales”. A partir de estos hallazgos, la deuterovaticana Congregación para la Doctrina de la Fe decretó el 21 de Octubre de 2013 que el clero y los laicos “no tienen permitido participar en reuniones, conferencias, o celebraciones públicas en las cuales la credibilidad de tales ‘apariciones’ se dé por afirmada”. [Parte de la información para este Comentario proviene de Catholic News Agency].
Verdaderos Católicos, las falsas apariciones son solo una de las formas en que los fieles conciliares (por no hablar de algunos tradicionalistas) están permitiendo a sus almas ser envenenadas, apartándolas de la Sagrada Escritura de Cristo y la Sagrada Tradición (las cuales son los dos fundamentos de la Fe Católica y la Revelación Pública) hacia especulaciones sobre los “secretos”. Aunque en Lourdes no se presentaron tales especulaciones, en Fátima ciertamente sucedió, llevando a muchos a desviarse de la Fe Católica hacia una suerte de “fatimismo” extremo, que herética y blasfemamente equipara los mensajes de Nuestra Señora de Fátima con la Sagrada Escritura, justo como advirtiera el gran místico de la Iglesia, San Juan de la Cruz: “Apártate de las visiones, apariciones y milagros tanto como puedas. Ten cuidado con las visiones aún cuando sean auténticas”.
https://youtu.be/gd1Wkv44nGk
ResponderEliminarLa oración y el perfume de rosas. Vive Medjugorje (16 febrero 2017)
Reina de la Paz TV
Sí, es importante orar, no por las gracias sensibles, sino porque la oración devota y sincera es comunicación permanente con Dios. No es tener ratos de oración, sino llevar la propia vida como una continua oración, orar sin cesar, aún en el trabajo diario (Ora et labóra, dice Padre San Benito en su Regla monástica).
ResponderEliminarLa oración es oración, eso de que podemos hacer de la vida una continua oración es modernismo. El labora en sí no es oración.
ResponderEliminarLo de hacer de la vida una continua oración es en el entendido de ofrecer a Dios todo cuanto nos disponemos a hacer durante el curso del día, teniendo siempre la mente puesta en Él mediante la oración espiritual, como se lee en la Imitación de Cristo (y esto ¿qué de modernista tiene?)
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