Novena editada en Madrid por Saturnino Calleja en 1898, con aprobación de la Autoridad Eclesiástica.
MODO DE HACER ESTA NOVENA.
Siendo
el fin de esta Novena la
mayor gloria de Dios, aumento de
la devoción de la Santa y bien de
sus devotos, podrá hacerse en cualquier tiempo del año, según tuviese el
devoto necesidad de su auxilio; aunque su principal tiempo
será antes del día 9 de Febrero, tiempo que tiene señalado para esta
Novena la devoción
de los fieles como anterior a su
gloriosa festividad.
Y también se podrá hacer en
nueve domingos o nueve días de
aquel en que cayó la festividad de
la Santa.
Aunque será más propio se haga
esta Novena en la iglesia, como
casa de Dios destinada para su
culto y el de sus santos, y propia casa de oración, delante del altar
de la gloriosa virgen y mártir
Santa Apolonia, o delante de una estampa
suya, se podrá hacer también en
cualquier oratorio o casa por los
enfermos y los que no puedan asistir a la Novena pública. Y será
mejor siempre, haciéndose en casa.
particular, que asista toda la familia, suplicando a la Santa conceda a todos sus peticiones, como la de
cada uno para sí; pues a los congregados en su nombre ofreció
Cristo, nuestro bien, su divina.
asistencia.
Haciéndose la Novena en nueve
días continuos, será bien confesar y comulgar en uno de ellos; y más
conveniente y proporcionado el
hacerla también el día 9 de Febrero, en que se celebra su festividad.
Si se hace en nueve domingos o
en nueve días correspondientes a
aquel en que se celebró su fiesta, se
confesará y comulgará en cada uno de ellos.
Teniendo
los devotos que hagan la Novena, de cualquier manera de las referidas,
una gran confianza de conseguir el beneficio que desean, pues siendo la
Santa tan valida del Señor, como lo demuestra su glorioso martirio en
fuego, por su intercesión lo han de alcanzar.
Advirtiendo
que lo que se llegue a pedir de bienes temporales ha de ser siempre
suponiendo que, a no convenir al bien de su alma, se le conmute la Santa
al más eficaz
para su salvación.
NOVENA DE LA VIRGEN Y MÁRTIR SANTA APOLONIA, ESPECIAL ABOGADA DE LOS DOLORES Y MALES DE DIENTES Y MUELAS
Puestos
de rodillas delante de una imagen de la gloriosa virgen y mártir Santa
Apolonia, encaminando todas sus acciones y afectos a la mayor gloria de
Dios, honra de María Santísima y veneración de la Santa, se hará la
señal de la cruz y se dirá el Acto de contrición.
Por la señal ✠ de la Santa Cruz, de nuestros ✠ enemigos, líbranos Señor ✠
Dios nuestro. En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu
Santo. Amén.
Señor
mío Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío;
por ser Vos quien sois, Bondad infinita, y porque os amo sobre todas
las cosas, me pesa de todo corazón de haberos ofendido; también me pesa
porque podéis castigarme con las penas del infierno. Ayudado de vuestra
divina gracia, propongo firmemente nunca más pecar, confesarme y cumplir
la penitencia que me fuere impuesta. Amén.
ORACIÓN INICIAL
Santísima
virgen y mártir Apolonia, abogada de los males de dientes: puesta mi
devoción a vuestros pies, atendiendo al que ahora aflige mi corazón, os
suplico y ruego consigáis de mi Dios y Señor lo que deseo y pido en esta
Novena, si es para gloria suya y honra vuestra; y si no, dirigid mi
súplica al Altísimo para alcanzar aquello que sea más conveniente al
provecho de mi alma.
DÍA PRIMERO – 31 DE ENERO
Poderoso
Señor, libertador de vuestros escogidos, protector de todos los fieles
que veneran y adoran vuestra soberana deidad: ofrézcoos los méritos de
vuestra pura esposa Santa Apolonia, a quien desde que nació librasteis
de toda corrupción, como cándida esposa destinada a vuestro celestial
tálamo, y por ellos os ruego me libre vuestra piedad generosa de toda
mancha y perdición de culpa, para que, pura y limpia mi alma, goce
vuestros divinos desposorios por eternidades de gloria. Y también os
suplico lo que deseo y pido en esta Novena para honra y gloria vuestra.
Aquí se rezará tres veces el Padre nuestro y el Ave María, y se presentará a la Santa su necesidad.
ORACIÓN A DIOS NUESTRO SEÑOR PARA TODOS LOS DÍAS
Oh
Dios, por cuyo amor la bienaventurada virgen y mártir Santa Apolonia
sufrió con tanta constancia que la arrancasen todos los dientes:
suplicámoste nos concedas que todos aquellos que implorasen su
intercesión sean libres de malos de dientes y de cabeza; y después de
las miserias de este destierro, les otorguéis la gracia de que arriben a
los gozos eternos de la patria celestial. Por nuestro Señor Jesucristo,
Hijo vuestro, que, siendo Dios, vive y reina con Vos en unidad del
Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. Amén.
ORACIÓN A SANTA APOLONIA PARA TODOS LOS DÍAS
Gloriosísima
virgen y mártir Santa Apolonia, que para ser verdadera imagen de
nuestro Redentor merecisteis la palma del martirio en una hoguera:
alcanzadme, oh candidísima abogada y protectora mía, de mi Dios y Señor
que, imitando vuestra fortaleza y constancia, crucifique mis deseos para
el mundo como el Apóstol, viviendo en él como peregrino que camina a
su patria. Y porque mientras la soberana Providencia me mantenga en el
estado de viador, puede ofrecerme el mundo, enemigo común de los
humanos, tropiezos y lazos para detenerme y hacerme caer en el abismo de
la culpa, suplícoos, oh candidísima virgen y madre mía, consigáis de
vuestro celestial Esposo y mi Señor me asista con su gracia para vencer
los estorbos que me propongan, y huir los peligros que me amenacen y
detengan para la felicidad de mi viaje. Y pues sois abogada de los males
de dientes y muelas, asistidme en ellos y dadme conformidad en mis
trabajos, intercediendo con la Reina de los ángeles, María Santísima,
Madre de Dios y Señora nuestra, como Madre que es de Misericordia, me
mire con sus clementísimos ojos, acompañándome en aquella tan peligrosa
como importante hora, para que, libre de las molestas invasiones del
mundo, logre con suave quietud el fin para que fuí creado en compañía
suya vuestra y de todos los santos y santas de la Corte celestial, donde
el silencio que tuvo mi tibieza en esta vida vuelva en himnos ele
alabanza de mi Dios y Señor por toda la eternidad. Y también os
suplico lo que deseo y pido en esta Novena, si es para honra de Dios y
bien de mi alma.
Antífona:
Celebremos solemnemente el glorioso triunfo de Santa Apolonia, que en
la ardiente llama venció al Infierno, y triunfó de los tormentos del
tirano. Aleluya.
℣. Con tu belleza y adorno.
℟. Levántate, avanza triunfante y reina.
ORACIÓN
Oh
Dios, que entre los demás milagros de vuestro poder habéis concedido la
victoria en el martirio aun al sexo débil: otorgadnos propicio que
cuantos celebramos el natalicio a la vida eterna de vuestra
bienaventurada Virgen y Mártir Santa Apolonia, vayamos a Vos con la
imitación de sus ejemplos.
Por la paz:
Antífona: Danos la paz, Señor, en nuestros días, porque no hay otro fuera de Ti, oh Dios nuestro, que pelee por nosotros.
℣. Haya paz por tu poder.
℟. Y abundancia en tus torres.
ORACIÓN
Oh
Dios, por quien son santos los deseos, rectos los consejos y justas las
obras; da a tus siervos aquella paz que el mundo no puede dar; para que
consagrados nuestros corazones a tus mandamientos y libres del temor de
los enemigos, sean tranquilos los tiempos con tu protección. Por
Jesucristo nuestro Señor. Amén.
En el nombre del Padre, y del Hijo ✠, y del Espíritu Santo. Amén.
DÍA SEGUNDO – 1 DE FEBRERO
Por la señal…
Acto de contrición y Oración para todos los días.
ORACIÓN
Gloriosa virgen y fervorosa mártir abogada mía Santa Apolonia, que con
largo ejercicio de mortificación te dispusiste e hiciste digna del
martirio, con que coronaste tantas virtudes, yo te suplico, Santa mía,
que me alcances de Dios una gracia eficaz, para vivir de suerte que me
disponga a conseguir una muerte dichosa; y el especial favor que ahora
te pido, interponiendo para ellos tus méritos y los de mi Señor
Jesucristo. Amén.
Rezar tres Padre nuestros y Ave Marías, y pedir la gracia que se desea recibir. Las demás Oraciones se rezarán todos los días.
DÍA TERCERO – 2 DE FEBRERO
Por la señal…
Acto de contrición y Oración para todos los días.
ORACIÓN
Gloriosa virgen y fervorosa mártir abogada mía Santa Apolonia, a quien
aun antes que la muerte, martirizaba en lo íntimo del corazón el celo
ardiente de la fe de Jesucristo viéndola perseguida e introducido en
Alejandría el sacrílego culto de los ídolos; yo te suplico Santa mía,
intercedas con Dios, por la intención de ese celo de la Fe Católica, y
que lo entres en mí; y asimismo por el favor particular que ahora te
pido, interponiendo para nao y otro juntos tus méritos, y los de mi
Señor Jesucristo. Amén.
Rezar tres Padre nuestros y Ave Marías, y pedir la gracia que se desea recibir. Las demás Oraciones se rezarán todos los días.
DÍA CUARTO – 3 DE FEBRERO
Por la señal…
Acto de contrición y Oración para todos los días.
ORACIÓN
Gloriosa
virgen y fervorosa mártir abogada mía Santa Apolonia, que con valiente
integridad y católica intrepidez repulsaste resueltamente la osadía del
tirano en persuadirte al culto de los dioses, avergonzándolo con eso y
exasperando su crueldad, alcánzame de Dios semejante firmeza en las
tentaciones del demonio y de la carne, para rebatirlas con entereza y no
ofenderlo nunca; y el favor que te pido mediante tus méritos y los de
mi Señor Jesucristo. Amén.
Rezar tres Padre nuestros y Ave Marías, y pedir la gracia que se desea recibir. Las demás Oraciones se rezarán todos los días.
DÍA QUINTO – 4 DE FEBRERO
Por la señal…
Acto de contrición y Oración para todos los días.
ORACIÓN
Gloriosa virgen y fervorosa mártir abogada mía Santa Apolonia, que lejos
de cesar a las persecuciones ni amenazas de los idolatras, los
confundías e intentabas eficazmente convertirlos, predicando llena de
espíritu y elocuencia del Cielo, la verdadera fe de Jesucristo;
alcánzame de Dios luz abundante para nunca dejarme pervertir de los
engaños del demonio y del mundo; y el favor que espero mediante tus
méritos, y los de mi Señor Jesucristo. Amén.
Rezar tres Padre nuestros y Ave Marías, y pedir la gracia que se desea recibir. Las demás Oraciones se rezarán todos los días.
DÍA SEXTO – 5 DE FEBRERO
Por la señal…
Acto de contrición y Oración para todos los días.
ORACIÓN
Gloriosa virgen y fervorosa mártir abogada mía Santa Apolonia, que
habiendo ostentado de lo que fortalece la gracia, te mostraste entera y
serena, como si no sintieras los agudos dolores del martirio: alcánzame
de Dios una resignada conformidad y paciencia en los que padeciere yo,
para satisfacer con ellos mis culpas; y el especial favor que ahora te
pido por la intercesión de tus méritos y los de mí Señor Jesucristo.
Amén.
Rezar tres Padre nuestros y Ave Marías, y pedir la gracia que se desea recibir. Las demás Oraciones se rezarán todos los días.
DÍA SÉPTIMO – 6 DE FEBRERO
Por la señal…
Acto de contrición y Oración para todos los días.
ORACIÓN
Gloriosa virgen y fervorosa mártir abogada mía Santa Apolonia, que
pudiste mirar con sereno semblante el espectáculo horroroso de la
hoguera a que te destinaba la tiranía sin espantarte ni temerla:
alcánzame de Dios un justo horror a las llamas del Infierno, y una firme
esperanza de que me libre de ellas; y a ti el favor que te pido por
medio de tu mérito unidos a los de mi Señor Jesucristo. Amén.
Rezar tres Padre nuestros y Ave Marías, y pedir la gracia que se desea recibir. Las demás Oraciones se rezarán todos los días.
DÍA OCTAVO – 7 DE FEBRERO
Por la señal…
Acto de contrición y Oración para todos los días.
ORACIÓN
Gloriosa
virgen y fervorosa mártir abogada mía Santa Apolonia, cuyo corazón fue
una hoguera de amor Divino, que te encendía en deseos de sacrificarte,
agradable víctima al obsequio de Dios, te suplico me alcances de su
Divina Majestad una centella de ese amor, que abrase y fortifique en mi
corazón sentimientos de lo que le he ofendido; y el favor que espero
ahora mediante tu intercesión y méritos y los de mi Señor Jesucristo.
Amén.
Rezar tres Padre nuestros y Ave Marías, y pedir la gracia que se desea recibir. Las demás Oraciones se rezarán todos los días.
DÍA NOVENO – 8 DE FEBRERO
Por la señal…
Acto de contrición y Oración para todos los días.
ORACIÓN
Gloriosa virgen y fervorosa mártir abogada mía Santa Apolonia, que con
asombro de los mismos verdugos, y en crédito del verdadero Dios,
inspirada del Cielo y arrebatada de su amor, te arrojaste a la hoguera
espantosa en que te consumiste, te suplico me consigas de Dios un
corazón dócil y pronto a sus inspiraciones, que obre de manera que en
todas mis acciones lo glorifique, y el favor que te pido por la
intercesión de tus méritos y los de mi Señor Jesucristo. Amén.
Rezar tres Padre nuestros y Ave Marías, y pedir la gracia que se desea recibir. Las demás Oraciones se rezarán todos los días.