Traducción de los comentarios de los Padres de TRADITIO.
Francisco
Bergoglio protegiéndose del supuesto "calentamiento global" del que
habla en su primera "Encíclica" secular como solista, a pesar del hecho
de que la evidencia científica ha estado mostrando que en la pasada
década ha habido un "enfriamento global".
El marxista de Bergoglio ha cambiado su Iglesia del Nuevo Orden en la Iglesia del Novísimo Orden, sin ningun distintivo a Save the Whales, Inc.
De acuerdo al Dogma Católico, esta "Encíclica" ABSOLUTAMENTE NO TIENE FUERZA VINCULANTE toda vez que ningún Papa (o Antipapa) tiene autoridad sobre asuntos seculares o científicos.
El marxista de Bergoglio ha cambiado su Iglesia del Nuevo Orden en la Iglesia del Novísimo Orden, sin ningun distintivo a Save the Whales, Inc.
De acuerdo al Dogma Católico, esta "Encíclica" ABSOLUTAMENTE NO TIENE FUERZA VINCULANTE toda vez que ningún Papa (o Antipapa) tiene autoridad sobre asuntos seculares o científicos.
El
18 de Junio de 2015, Francisco Bergoglio publicó su tan anunciada Carta
Encíclica sobre el "calentamiento global", titulada provisionalmente Laudato si’, que en Latín se traduciría como Laudétur.
La versión oficial en Latín, sin embargo, aún no ha salido a la luz
pública. Esta es una táctica común de la Neo-iglesia: presentar
encíclicas, catecismos, etc., en vernáculo. Así, cuando los líderes de
la iglesia conciliar reaccionan en contra, ellos "masajean" el texto y
presentan la versión final en Latín.
Un
antecedente es cuando el Non sancto Wojtyla/JPII usó esta estrategia
cuando intentó, contraviniendo las Sagradas Escrituras y la Sagrada
Tradición, suprimir la pena de muerte en la edición vernácula de su
Catecismo de 1992. Luego de que varios "prelados" hicieran públicas
correcciones a Wojtyla en su errónea teología, la condenación incluida
en el Catecismo Novus Ordo fue atenuada en su versión oficial en Latín, Catechísmus Cathólicæ Ecclésiæ,
publicada cinco años después, en 1997. No hay ningún secreto acerca de
que Wojtyla lo ha intentado hacer. Las ediciones en la versión vulgar
contienen notas donde se admite que están "sujetas a revisión de
concordancia con la edición típica en Latín (editio typica) cuando ésta sea publicada".
Así
las cosas, en su primera encíclica como solista esto es, que no tiene
co-autoría (como es sabido) con el Antipapa emérito Ratzinger
Tauber/Benedicto XVI -como pasó con Lumen Fidei el 29 de Junio de
2013-, Franciso Bergoglio ha públicamente inaugurado su Iglesia del
Novísimo Orden sobre bases marxistas, la secularización de la Iglesia
Novus Ordo, que fue establecida en 1965 al concluirse el modernista
Concilio Vaticano II para remplazar a la Iglesia Católica como la
"Iglesia institucional". Como parte de su campaña anticatólica de
desinformación, Bergoglio está tratando de asustar al público aceptanndo
una vasta expansión de las actividades gubernamentales supuestamente
dirigidas a contrarrestar la teoría sin probar del "calentamiento
global" cuando, en la práctica, los datos registrados en los últimos
años han presentado un "enfriamiento global". ¡Upss! Las desastrosas
consecuencias de un gobierno autocrático marxista están, sin embargo,
probadas.
La
pseudoencíclica de Francisco Bergoglio es una horrible vergüenza para
aquellos que miran retrospectivamente las profundamente religiosas y
elevadas Encíclicas del pasado, yendo tan lejos como la Iglesia en
tiempos de los Apóstoles, cuando ellas fueron instituidas. En efecto,
muchas de las Epístolas en el Nuevo Testamento son Cartas Encíclicas. La
pseudoencíclica bergogliana está conformada por seis capítulos
intitulados "Lo que le está pasando a nuestra casa", "El Evangelio de la ecología (La Creación)", "Las raíces humanas de la crisis ecológica", "Ecología integral", "Líneas de orientación y acción", y "Educación y espiritualidad ecológica"
Se oye más como un libro escolar liberal sobre la ¿ciencia? de la
"ecología" que como algo que tenga que ver con el Catolicismo, muecho
menos con Nuestro Señor Jesucristo y su famosa doctrina: "Mi reino NO es
de este mundo" (San Juan 18:36).
Bergoglio
está empleando la rebuscada dialéctica hegeliana del "Aquinate
protestante", el filósofo alemán Georg Hegel, al crear un problema, en
este caso, el "calentamineto global", para generar una reacción pública:
el miedo. Entonces, con Bergoglio como su animador, los gobiernos
autocráticos podrán ofrecer una solución predeterminada: LA EXPANSIÓN
DEL GOBIERNO A COSTAS DE LA LIBERTAD PERSONAL, que es el derecho del
hombre, como lo explicara el Doctor Universal de la Iglesia Católica, el
angélico Santo Tomás de Aquino. La técnica de desinformación
anticatólica usada por Bergoglio ha sido empleada exitosamente por los
políticos durante milenios para expandir los poderes del gobierno y
restringir la libertad Católica que Dios le ha dado a los hombres. En
términos simples, Bergoglio no trata realmente de "salvar el medio
ambiente", sino de otorgarle a los gobiernos nacionales e
internacionales mayores poderes autocráticos.
En
su apelo a la filosofía marxista, Bergoglio sigue las huellas de su
predecesor, el Antipapa Ratzinger, quien abiertamente pidió un gobierno
mundial. El vaticano cisma ama que los gobiernos coarten las libertades
individuales, excepto cuando Ratzinger y Bergoglio están en la mira de
la Comisión de las Naciones Unidas como encubridores de pedófilos. Allí,
el Vaticano rechaza visceralmente cualquier autoridad moral que no sea
su propia autoridad corrupta. Pero esta pseudoencíclica puede ser el
principio del fin para la iglesia bergogliana. Bergoglio ha alborotado
el avispero incluso entre sus "feligreses" alrededor del mundo, un
amplio porcentaje de los cuales ya han rechazado su pseudoencíclica y su
aparente "autoridad" para presentarla. Niegan que la "encíclica"
represente la Fe Católica y Apostólica, inclusor, que tenga relación con
la Fe Católica y Apostólica.
Sobre
todo, si algo ha de estar comprendido claramente es que de acuerdo al
dogma Católico, esta pseudoencíclica NO TIENE EN ABSOLUTO FUERZA
VINCULANTE EN LA RELIGIÓN, porque ningún Papa (o Antipapa) tiene
autoridad sobre materias seculares o científicas. Bergoglio habla aquí
no como Pontífice (de hecho, nunca lo hace), sino como representante de
la entidad política conocida como la Città del Vaticano (Estado de la
Ciudad Vatican City State), un cuasi-país constituido por el Duce Benito
Mussolini en 1929, en un área inferior a medio kilómetro cuadrado. Es
un dogma Católico, formulado en el Concilio Vaticano y solemnemente
promulgado por el Papa Pío IX, que el Papa no ejerce la infalibilidad en
cuanto a la ciencia y la política. [Alguna información para este Comentario proviene de Catholic World News.]
Fieles
Católicos, es claro que Francisco Bergoglio, que definitivamente está
asociado al marxismo, está tratando de convertir a su iglesia
deuterovaticana del Novus Ordo en la del Novíssimus Ordo, una
corporación secular no religiosa. Por eso, su secta no se diferencia en
nada de otras corporaciones seculares como Save the Whales Inc., y Hug a
Tree Inc. Los verdaderos Católicos pueden tener plena confianza en que
esta pseudoencíclica no tiene nada de la Sana Doctrina Católica y su
promulgador no ejerce autoridad papal, sino que viene del jefe político
del Estado de la Ciudad del Vaticano -que no tiene más autoridad que,
digamos, Vladimir Putin-.
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Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)