Un
 vídeo en nombre de Michael Del Bufalo certifica que en el curso de una 
incursión al amanecer –tal vez esta mañana– fueron sustraídas de la 
iglesia romana de Santa María en Traspontina, ya sede de 
diversos ritos amazónicos presididos por la “sacerdotisa” lesbiana anglicana argentino-canadiense Emilie Teresa Smith Ayala (obviamente con el placet del archichamán Francisco Bergoglio), las hasta ahora célebres estatuillas de la Pachamama (cuya identidad fue confirmada
 en la rueda de prensa, aunque lo quieran negar Paolo Ruffini). Fueron 
en seguida arrojadas al Tíber frente al Castillo de Sant’Angelo. Aquí el
 vídeo de la operación:
El hombre que grabó el vídeo hizo la siguiente declaración vía telefónica:
«Esto fue hecho por una sola razón. Nuestro Señor y Salvador Jesucristo, su Santísima Madre, y todos los que siguen a Cristo, están siendo atacados por miembros de nuestra propia Iglesia. ¡No aceptemos esto! ¡No permanezcamos más en Silencio! ¡Comencemos a actuar AHORA!
Porque amamos la humanidad, no podemos aceptar que la gente de cierta región no deban ser bautizados y por tanto les sea negada la entrada al Cielo. Es nu estro deber seguir las palabras de Dios, como nuestra Santísima Madre lo hizo. No hay un segundo camino de salvación.
Christus vincit, Christus regnat, Christus ímperat!».
Por
 su parte Paolo Ruffini La Loggia, prefecto del Dicasterio para las 
Comunicaciones (ex-director de RAI Tre, hijo del partisano democristiano
 Attilio Ruffini -sobrino del cardenal Ernesto Ruffini- y de Zina Maria 
La Loggia -hermana del político Enrico La Loggia-), calificó el hecho 
como una “bravata”, diciendo: «Ya hemos repetido varias veces aquí, que 
las estatuas indígenas representan la vida, la fertilidad, la madre 
tierra; y ver [en ellas] símbolos de paganismo es ver mal donde no hay 
mal. [Arrojarlas al Tíber] me parece que es un gesto que contradice la 
experiencia de diálogo especial que desde el Sínodo debería guiar 
siempre a todos. No sé qué más añadir al respecto, aparte de que el robo
 es una bravata que se comenta por sí sola». Los padres carmelitas 
calzados, que regentan la iglesia, presentaron por medio de fray Antonio
 Soffiantini (curador de la muestra de la asociación “Casa Comune”, 
vinculada a la REPAM) denuncia penal ante la policía italiana contra dos
 sujetos que fueron detenidos tras ir por la estatua mayor a las 10:30h 
(hora local), que comenzó la investigación (aunque el valor material de 
los ídolos es irrelevante, además de tener la cara de Bergoglio).
ACTUALIZACIÓN (5 de Noviembre de 2019): El
 protagonista de este acto es el barón Alexander von Tschugguel zu 
Tramin, político conservador y activista católico tradicionalista de 
Austria. En una entrevista, relató que tomó la decisión de arrojar los 
ídolos al Tíber al enterarse in situ que el Sínodo tenía 
finalidad política y que en el Amazonas no se realizaban 
bautizmos «porque no hace parte de la cultura indígena local» (cuando el
 mandato de Nuestro Señor Jesucristo es claro: «Id por todo el mundo y 
predicad el Evangelio a todas las naciones, BAUTIZÁNDOLAS EN EL NOMBRE 
DEL PADRE, Y DEL HIJO, Y DEL ESPÍRITU SANTO, y enseñándoles a guardar lo
 que os he mandado. EL QUE CREYERE Y SE BAUTIZARE, ESE SE SALVARÁ; EL 
QUE NO CREYERE, SE CONDENARÁ»), y ver que había gente adorándolos en los
 Jardines Vaticanos, contraviniendo el primer mandamiento de la Ley de 
Dios: «Yo soy el Señor tu Dios, NO TENDRÁS OTROS DIOSES DELANTE DE MÍ».
Von Tschugguel señaló que había permanecido en el anonimato para darle 
protagonismo al hecho de arrojar las pachamamas al Tíber, pero que 
decidió salir a la luz pública como autor de esta hazaña en respuesta al
 apoyo recibido de muchos fieles y clérigos.


Un antropólogo consultado por Life Site News dijo que la estatua «técnicamente constituye una suerte de trasposición “amazónica” de las complejas especificidades del culto andino a la Pachamama; una variación sobre el tema o, aún mejor, una suerte de sincretismo transamericano en el cual convergen elementos andinos, afroamericanos y New Age. Un ídolo inventado e iconográficamente “camuflado” con pintura facial “amazónica”, usado en Roma como un instrumento de presión política y religiosa».
ResponderEliminarhttps://www.lifesitenews.com/news/symbol-of-life-or-pachamama-vatican-and-repam-synod-organizers-divided-on-identity-of-mysterious-statue
David Fabbri (52), que en anteriores oportunidades señaló al presidente del consejo de ministros Giuseppe Conte Roberti como «satanista masón miembro del Partido del Demonio comandado por George Soros», anatematizó a los jueces del Tribunal de Menores de Bolonia por el caso de los niños de Bibbiano, arrojó bananas a ex-ministra de integración y cooperación internacional congoleña Kashetu “Cécile” Kyenge en un evento del PD, y puso imágenes del Duce Benito Mussolini con el epígrafe «Por un mundo más pulido, vuelve a la vida, tío Benito» en todo el centro de Rímini, reivindicó la incursión en la iglesia Santa María en Traspontina en la que las estatuas fueron arrojadas al río Tíber.
ResponderEliminarhttps://www.youtube.com/watch?v=EYd3dqVArW0
¿no habrán sido ustedes no??? jajaja
ResponderEliminarRondón Santos y J de la C digan la verdad fueron ustedes.... jajajaja
ResponderEliminarLas pachas pusieron gesto adusto porque las iban a remojar en el Tiber jajajaja
ResponderEliminarJuntemos firmas para que no tomen represalias contra ellos. ¿alquien sabe como hacerlo? ese sistema que hay para firmar por internet, si alguien sabe como se hace avise.
ResponderEliminarDenuncia penal deberíamos hacerles a ellos, los modernistas por profanar iglesias. Dialogo ...que diálogo ni nada manga de pervertidos usurpadores.
ResponderEliminarDie soon, pope Francis. With God’s help, you will kick the bucket today, and no tears on your tomb. I hope one day your corpse will follow the Pachamama statues in the Tiber.
ResponderEliminarDown there, at the bottom of it, eaten by animals, is where it belongs.