Traducción del Comentario de los Padres de TRADITIO.
Los
 padres Josef Peruschitz, Juozas Montvila y Thomas Byles dieron la 
absolución general y la bendición final en tiempo de desastre a los 
católicos a bordo del RMS Titanic, que se hundió hace más de 100 años, 
llevando consigo 1.500 almas a las profundidades de las aguas del 
Atlántico Norte.
El Papa San Pío X describió al padre Bytes como “mártir” de la Fe
El
 21 de Junio de 1912, las 1.500 almas que perecieron en el naufragio del
 RMS Titanic al menos tuvieron sacerdotes católicos ordenados y la Misa 
Latina Tradicional para proporcionarles poderosas gracias sacramentales 
en esa catástrofe. Hoy, tales barcos no tienen sacerdotes, solo 
presbíteros novusordianos que nunca fueron ordenados como sacerdotes 
válidos con el Sacramento de las Órdenes Sagradas, sino inválidamente 
“instalados” como “presbíteros”, como ministros protestantes, bajo el 
protestantizado Nuevo Ordinal usado por la Iglesia Conciliar del Nuevo 
Orden desde 1968, la cual ciertamente no es la Iglesia Católica.
Habían
 tres sacerdotes católicos a bordo del Titanic: los padres Josef 
(Benedict) Peruschitz Neudecker OSB (41 años, de Straßlach-Dingharting, 
Baviera), Juozas Montvila Karalevicius (27 años, de Gudine, Lituania), y
 Thomas (Roussel) Davids Byles (42 años, de Grosvenor-road, Inglaterra).
 Ellos escogieron, en vez de tomar su lugar en los botes salvavidas, 
permanecer en el barco para administrar los Sacramentos a los que 
estaban a bordo. Posteriormente, el Papa San Pío X describió al padre 
Byles como “mártir” de la Fe [Parte de la información para este 
Comentario proviene de ChurchPop].
Católicos
 tradicionales, el padre Byles había celebrado la Misa Latina 
Tradicional (en este punto ni siquiera se concebían ni la falsa Misa de 
1962 ni el servicio Novus Ordo) para los pasajeros, y todos los tres 
sacerdotes dieron la absolución general y la bendición final en tiempo 
de desastre. Los pasajeros informaron que el comportamiento calmado de 
los sacerdotes calmó a los que quedaban en el barco. Mientras el barco 
se hundía, los católicos a bordo estaban rezando el Santo Rosario en 
latín con los tres sacerdotes.

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+Jorge de la Compasión (Autor del blog)
Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)