A raíz de la entrevista que dio Francisco Bergoglio a la Associated Press el 24 de Enero, donde dijo, el presbítero jesuita estadounidense James Martin le pidió una aclaración con tres preguntas:
«Santo Padre, gracias por su fuerte llamado a descriminalizar la homosexualidad. ¿Por qué ha decidido decir esto en este momento?Parece que ha habido confusión sobre su comentario “Ser gay es un pecado”, lo cual, por supuesto, no es parte de la doctrina de la iglesia [sic]. Mi sentir fue que Vd. estaba simplemente repitiendo lo que otros pueden decir hipotéticamente. ¿Vd. piensa que el simple hecho de ser gay es un pecado?¿Qué les diría a los obispos católicos que aún apoyan la criminalización de la homosexualidad?».
y tres días después, recibió de Bergoglio una nota manuscrita y su adjunto mecanografiado, los cuales publicó en la página de su movimiento Outreach.
Mientras, las dúbia de los cuatro cardenales, va para siete años sin recibir respuesta formal. Inclusive, dos de ellos (Carlo Caffarra y Joachim Meisner) están muertos desde 2017. Burke y Brandmüller, que sigan esperando sentados. Pero de todos modos, San Pablo (o mejor, el Espíritu Santo por medio de San Pablo), es claro al decir que los sodomitas, al igual que los fornicarios, adúlteros, borrachos, avaros y blasfemos, no heredarán el Reino de Dios (cf. I Corintios VI, 9); y que los que aprueban esas cosas merecen la muerte eterna [= condenación] al igual que los que las hacen (Romanos I, 32).
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios deberán relacionarse con el artículo. Los administradores se reservan el derecho de publicación, y renuncian a TODA responsabilidad por el contenido de los comentarios que no sean de su autoría. La blasfemia está estrictamente prohibida, y los insultos a la administración es causal de no publicación.
Comentar aquí significa aceptar las condiciones anteriores. De lo contrario, ABSTENERSE.
+Jorge de la Compasión (Autor del blog)
Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)