El diario francés Le Parisien informó que el neuro-radiólogo Christophe Habas Maupeu (foto), de 55 años de edad, ex Gran Maestre del Gran Oriente de Francia entre 2016 y 2017, falleció de una larga enfermedad el 28 de Mayo, y que una “Eucaristía en su memoria” se llevaría a cabo en la iglesia de San Eustaquio de París el viernes 3 de Junio próximo pasado, y al día siguiente sería enterrado en el panteón familiar de Gan (Pirineos Atlánticos) donde se le rindieron honores masónicos.
Habas
 (quien se inició en la francmasonería en 1993) fue jefe del 
departamento de neuroimagen del hospital Quinze-Vingt (literalmente 
“Hospital de los Trescientos”) de París y profesor asociado de la 
Universidad de Versalles Saint-Quentin-en-Yvelines. En 2021, la Academia
 de Medicina le otorgó el premio de la empresa de agua mineral 
Evian-Les-Bains por su trabajo en el análisis de resonancia magnética de
 la estructura y el funcionamiento del cerebelo, cuyas investigaciones 
fueron impulsadas por el transhumanismo que profesaba.
Con
 más de 50.000 miembros, el Gran Oriente de Francia es la secta masónica
 más grande y extremista de la nación gabacha.
 Representa a ultranza el odio contra la Iglesia, el homosexualismo, el 
aborto, el 
laicismo y el oligarquismo, y ha montado en la presidencia a personajes 
como François Mitterrand, Nicolas Sarkozy o Emmanuel Macron.
Desde
 su fundación en 1717 (e incluso antes, pues la Santísima Virgen María en su aparición como Nuestra Señora del Buen Suceso en Quito la llamó «secta maldita»), la francmasonería ha
 sido condenada por distintos papas, y el canon 2335 del Código 
Pío-Benedictino de Derecho Canónico declaró excomulgado latæ senténtiæ a
 quienes adhieran a la masonería, privándoles por consiguiente de la 
sepultura eclesiástica a tenor del canon 1240 § 1, numeral 2.º. Incluso 
el aguado canon 1374 wojtyliano condena la pertenencia a esta o 
cualquier otra «asociación que conspire contra la Iglesia» con 
entredicho, y la privación de sepultura eclesiástica por el canon 1184 § 1, numeral 3.º.
El profesor de Derecho Canónico Franck Bouscau afirmó en Médias Presse
 que el presbítero que aceptó presidir tales exequias y (en dado caso, 
sus superiores) deben ser sancionados por violar la disciplina canónica.
 Pero como se trata (una vez más) de la secta del Novus Ordo, creada por
 los francmasones Ángelo Giuseppe Roncalli Marzolla/Juan XXIII bis y 
Giovanni Battista Montini Alghisi/Pablo VI, y dirigida actualmente por 
Jorge Mario Bergoglio Sívori/Francisco I, los cánones son un saludo a la
 bandera para ellos, aplicándose con rigor solo contra los que conservan
 algo de catolicidad dentro de esa secta.   
Como fuere, este episodio es otra prueba más que el Novus Ordo Missæ (ni en la versión roncalliana ni en la montiniana) NO ES LA VERDADERA MISA CATÓLICA.

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+Jorge de la Compasión (Autor del blog)
Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)