Antes
de presentar estos dos artículos, queremos pedir perdón por NO HABER
PUBLICADO ESTO ANTES (aunque igualmente, salió DEMASIADO TARDE en su
original, dada la censura del establecimiento). Pero bueno, aquí el
hecho: Al masonazo satánico (y quizá descendiente de marranos) Juan
Manuel Santos Calderón, indigno presidente de Colombia, le otorgaron el
Nóbel de Paz, muy a despecho de que el pueblo de su país rechazó sus
acuerdos (de Santos, aunque ese engendro de los mismísimos Infiernos
debería cambiarse el nombre) con los narcoterroristas comunistas ateos
de las FARC.
1° EL DESCRÉDITO MUNDIAL DEL NOBEL DE PAZ (Editorial del Diario EL ESPAÑOL)
La concesión del Nobel de la Paz a Juan Manuel Santos
tras el sonado fracaso de su acuerdo con las FARC es un nuevo golpe a
la credibilidad de este galardón. El Nobel de la Paz arrastra sonoras
polémicas, pero nunca hasta ahora se había dado en contra de la voluntad
de un país.
No es de recibo que Santos, que debería
haber dimitido tras el mayor ridículo internacional que se recuerda, sea
elevado a los altares por el Comité de los Nobel. El presidente
colombiano dio por seguro ante la comunidad internacional que el acuerdo
con la guerrilla sería refrendado en las urnas, y lo celebró de
antemano reuniendo en Cartagena de Indias a jefes de Estado y
personalidades de todo el mundo. Seis días después perdió el referéndum
estrepitosamente.
Desautorizado en las urnas
El
precedente más cercano de una situación parecida es la de David Cameron
y su referéndum del brexit. Al menos el primer ministro británico fue
consecuente y dimitió de inmediato, y por supuesto no entra en ningún
cálculo que sea galardonado por ningún organismo internacional.
Santos
ha quedado desautorizado para seguir liderando las conversaciones de
paz en su país -más aún si cabe después de que él mismo manifestara que
un no de sus compatriotas anularía todo el proceso-, pero es que, en su
intento por darle un espaldarazo, el Comité de los Nobel chapotea junto a
él en el descrédito.
¿Premiamos a Chamberlain?
Si
lo que premian los Nobel es el intento de lograr la paz por la paz
misma, ¿debería haberlo obtenido Chamberlain tras la Conferencia de
Múnich en la que decidió no oponerse al expansionismo de Hitler para
júblio de millones de británicos que lo consideraron el gran valedor de
la paz?
Es probable que los organizadores del premio se
hayan intentado homenajear a sí mismos, pues hay que tener presente que
Noruega ha sido, junto con Cuba, el gran patrocinador del proceso
colombiano. Eso hace peor aún su decisión, por cuanto en este caso son
parte interesada.
Bofetada a los colombianos
Sabedores de que su decisión iba
a ser polémica, el Comité de los Nobel ha tratado de justificarla como
una forma de reconocer a todo el pueblo colombiano "que a pesar de las
grandes dificultades y abusos no ha abandonado la esperanza de una paz
justa". Sin embargo, ese homenaje es una bofetada a los ciudadanos y
también a líderes que, como el ex presidente Ávaro Uribe, querían la
paz, pero no a cualquier precio.
El Nobel a Santos entra a formar
parte de esa lista de galardones cargados de polémica, como el
concedido en su día a Henry Kissinger -premiado por frenar la Guerra de
Vietnam pero con grandes sombras en su currículum, como el apoyo al
golpe de Augusto Pinochet- o el entregado a Obama -a quien se quiso
reconocer su contribución a la paz en el mundo sólo un año después de
haber llegado a la Casa Blanca-.
En el caso del Nobel de la Paz a
Santos estamos ante un error histórico, porque nos encontramos con un
premio que es incongruente con aquello que teóricamente se propone
defender. Lo valioso no es la paz, sino que ésta sea justa y acorde a
los valores democráticos.
2° PERIODISTA VENEZOLANO: JUAN MANUEL SANTOS, UN COMUNISTA QUE USABA EL ALIAS "SANTIAGO".
Pedro
García, influyente periodista venezolano de la cadena DTV, acaba de
sacar a la luz púbica (3 de Marzo de 2016) un escandaloso video en donde cuenta -con lujo de
detalles- sobre las andanzas de Juan Manuel Santos en Cuba en los años
90. Entérese de cómo el hoy presidente de Colombia, alias “Santiago”,
se consolida como el fiel aliado de Fidel Casto, de Maduro, de las FARC y
del comunismo internacional. El documento es demoledor. Es una
información que aterra, difícil de procesar, pero que le ayudará a atar
cabos sueltos y a entender el tamaño de la humillante entrega que hacen
de Colombia a través de las sórdidas e ilegales negociaciones con FARC
en La Habana. A continuación publicamos el video, junto con el texto de
su transcripción. A partir de este momento, es su ENTERA
RESPONSABILIDAD educarse y educar a los demás sobre las graves amenazas
que se ciernen sobre nuestra amada Colombia. Ver vídeo
AQUÍ.
TRANSCRIPCIÓN DEL VÍDEO DE PEDRO GARCÍA:
Los
tres hijos de don Enrique Santos a los que me quiero referir son
Enrique Santos Calderón, Juan Manuel Santos Calderón, y Felipe Santos
Calderón.
Enrique Santos Calderón, el mayor de los hermanos, con
una afición muy particular por la marihuana, por lo que Colorado por
ejemplo podría ser un buen sitio para que él viviera, tuvo a mal -porque eso no fue a bien- organizar un movimiento subversivo
guerrillero en Colombia. Que si ustedes recordarán, se llamo el M19.
Junto a otro grupo de muchachos pudientes de Colombia, decidieron armar
este grupo guerrillero para libertar a Colombia de las malas influencias
y traerla por el derrotero del pensamiento progresista comunista del Che, de Mao y de Fidel.
Mientras Enrique Santos manejaba el M19,
se acercaba al ELN y a las FARC, y además de eso creaba revistas y
trabajaba en EL TIEMPO -ese famoso diario de Colombia propiedad hasta
hace algunos años de la familia Santos, y en donde su papá, don Enrique
Santos Castillo, fue redactor del mismo por 59 años- Juan Manuel
estudiaba en el Colegio San Carlos.
Y Juan Manuel -buen
estudiante- terminaba sus clases, y después se iba a unos talleres de
comunismo. ¿O es mentira Juan Manuel? Unos talleres en donde le
enseñaban a ser un comunista ejemplar; en donde el pensamiento del Che
se metía como un suero intravenoso en las huestes de aquellos jovencitos
que se preparaban para ser los nuevos hombres del futuro, y dónde tú,
Juan Manuel, fuiste un estudiante aventajado.
Mientras todo esto
sucedía, tú llegaste a la posibilidad de ser ministro en el gobierno de
Gaviria. Estudiaste bajo la doctrina del Che y Mao, y te fuiste
preparando.
Pero antes de llegar allí hiciste varias cosas. Por
ejemplo, cuando eras ministro de Gaviria fuiste varias veces a Panamá (y
eso está documentado Juan Manuel, eso no es mentira mía), y después de
llegar a Panamá en visita oficial te montaste en unos aviones de cubana
de Aviación en dónde los panameños sin querer alcahuetearon tu posición.
Entonces te montaban en un avión de cubana y te llevaban a la Habana, a
hablar con Fidel y con Raúl.
Juan Manuel, entre el 95 y el 97 tú
no te llamabas Juan Manuel. Tú te llamabas Santiago. Santiago era tu
nombre código para que los cubanos se encargarán de explicarle al mundo,
a través de gente como tú, que su método de gobierno era el más
efectivo, ¿Verdad que sí, Santiago?
De esa época Santiago, hay
una foto que mi querida Jennifer González va a colocar en pantalla, en
donde tú sales dándole la mano a Fidel, sonreído y feliz, dándote la
gran vida en la Habana, y en donde el Departamento de Asuntos
Latinoamericanos del gobierno de Fidel te llevaba para que te reunieras
con Fidel y con Raúl para que te contaran lo que se quería a futuro
dentro del gobierno colombiano.
Alias
Santiago, nombre del código asignado a Juan Manuel Santos por Fidel
Castro, con el cual aparece abrazado. Castro fue su mentor en los años
70, responsable directo de la entrega de Colombia al comunismo
internacional.
En
esa época tú te reuniste con muchos muchachos venezolanos, algunos de
ellos de la Universidad Central, y otros sin estudios, pero todos
estudiaron y todos se convirtieron en comunistas cubanos, entre ellos
Nicolás. Sí, por eso tú bien dijiste años después que tu mejor amigo era
el presidente de Venezuela. Porque siempre fuiste amigo de él.
En
el gobierno de Ernesto Samper (el narc gobierno de Ernesto Samper), tu
hermano Enrique y el diario EL TIEMPO se convirtieron en los críticos
más acérrimos del presidente Ernesto Samper. Pero mucha gente es testigo
de aquellas noches de farra en las discotecas colombianas en donde tú,
tu hermano, Ernesto, y Daniel Samper, salían a rumbear después de que tu
hermano Enrique los criticaba en EL TIEMPO.
¿Te
acuerdas de todas la veces que tú y tu hermano chantajearon a la gente
para que les dieran publicidad en el pasquín que hablaba maravillas de
las FARC y del M19, y en el periódico EL TIEMPO, donde ustedes se
ganaban unas jugosas comisiones por esa publicidad?
¿Te
acuerdas también Juan Manuel como tu padre, un derechista a ultranza
-amante del franquismo-, te decía que el camino del futuro no era el
comunismo? ¿Que la izquierda no los iba a llevar a ningún lado ni a tu
hermano ni a ti? ¿También te acuerdas como te hiciste de oídos sordos
ante lo que te dijo tu padre, un hombre de una formación muy derecha,
muy derecha, porque era franquista radical, así como tú eres
izquierdista radical?
Las vueltas que da la vida Juan
Manuel. Esta semana sale una noticia de la UNASUR, ese famoso movimiento
al que no dejaban entrar a Chávez y a Venezuela, pero que de repente lo
dejaron entrar, y en el que hoy manda Ernesto Samper, ¡oh qué
casualidad!, ¡el amigo de tu hermano! ¡El que rumbeaba contigo! El que
le permitió a tu hermano menor alojarse en el hotel de Cali, en el
Intercontinental, en la Suite presidencial que era pagada por los
Rodríguez Orejuela. Sí, los del Cartel de Cali, porque ¿No me vas a
decir tú que el apreciado menor de la dinastía, Felipe, era una ficha
del Cartel de Cali? ¿Verdad que si?
¿Verdad que Fidel
-mi querido Santiago- (déjame llamarte por tu nombre)... verdad Santiago
que Fidel te mandó a que te infiltraras en el gobierno de Uribe, y lo
lograste? Y después de que te infiltraste te hiciste amigo de Uribe, y
después de que estabas adentro del gobierno -y a pesar de que Uribe
nunca te vio con buenos ojos- te peleaste con Hugo Chávez, ¿te acuerdas?
Y mientras en toda Venezuela decíamos que tú eras el
enemigo de Hugo Chávez, que eras el tipo ideal para ser el próximo
presidente de Colombia, Uribe te cogió confianza, porque tú te peleaste
con Chávez, y resulta chico que era mentira.
Resulta que
todo era un plan maestro de Fidel, para que tú fueras el próximo
presidente de Colombia, y para que Nicolás fuera el próximo presidente
de Venezuela, y para que tú desaparecieras los papeles de Nicolás
Maduro.
“El plan se le dio a Fidel. Uribe confió en ti.
Al día siguiente que ganaste las elecciones le sacaste la lengua a
Uribe, y le dijiste que era un pendejo. Se lo dijiste delante de todo el
mundo y te burlaste de él porque eres un comunista.
¡Eso
es lo que eres Juan Manuel! ¡Eres un comunista que se regocija cada vez
que en Venezuela matan a un estudiante! ¡Eres un comunista que estás
viendo cómo Colombia empieza a ganar dinero a costillas de Venezuela,
sin darte cuenta que los cubanos te van a quitar el dinero a ti también,
como se lo quitaron a Venezuela! Y no me digan mis queridos amigos
colombianos que a ustedes eso no les va a pasar. Sí les va a pasar.
Y
les va a pasar si no se ponen pilas desde ahora. ¿O por qué ustedes
creen que son las negociaciones de las FARC?, sino para limpiarles la
plana a las FARC, y decir aquí no ha pasado nada y ahora las FARC son
beligerantes y se van a lanzar a la presidencia de la república “para ir
después de mí”.
Todo eso es una negociación de Fidel. Para que el estado Cubano se haga todavía más grande.
¡Juan
Manuel, hoy se te cayó la careta! ¡Hoy te expones ante el mundo como lo
que eres, un comunista que no ama a su patria! ¡Un comunista que odia a
Colombia! ¡Un comunista que se arrastra como una meretriz ante los
intereses cubanos!
¡Un comunista que ha permitido que
otro colombiano comunista como tú sea el presidente ilegal e ilegitimo
de Venezuela, por orden de Fidel y de Raúl!
Alias
Santiago abraza al dictador comunista de Venezuela Nicolás Maduro,
durante del sepelio del dictador Hugo Chávez en la ciudad de Caracas.
Año 2013.
Un comunista que apoyó movimientos
terroristas y que lo sigue haciendo, porque cuando tú organizas las
charlas de paz de las FARC en Cuba, estás siendo consorte protector del
comunismo a nivel mundial, terrorista Santiago. ¿O Juan Manuel, o
Santiago?
¿Qué nombre te gusta más? ¿El que te puso
Fidel, Santiago, o el tuyo, Juan Manuel? Porque del tuyo manchas el
nombre de próceres colombianos, manchas el nombre de ex presidentes
colombianos. Haces añicos a un sitio tan maravilloso de Colombia como es
Tunja, que lo acabas por completo.
¡Ay Juan Manuel! ¿O
Santiago? Si Ricaurte, tu tatara-tatara-tatarabuelo viviera,
probablemente te hubiese metido con él en el polvorín y se hubiesen
volado los dos.
Porque la verdad es que así, como la
sangre de los próceres colombianos qué te antecedió era merecedora del
respeto y del reconocimiento eterno por parte de la población del país,
la sangre tuya no merece ser reconocida mucho menos aplaudida y mucho
menos enorgullecida.
Porque tú hoy, junto a tu compadre
Ernesto Samper, junto a tu mejor amigo Nicolás Maduro, y junto a los
otros chulos del área, te estás encargando de llevar por la tierra y de
romper de un plumazo el sueño de Bolívar. Tú hoy acabas con todo como el
barbarazo, y eres el corresponsable de la debacle moral política
económica y social de la región.