«En la furiosa última guerra mundial, mientras ocurrían las cosas más atroces en la tierra, en el mar y en el aire, tal vez se infundió la persuasión en las mentes aterrorizadas de que ya no quedaba ningún sentido de misericordia en los corazones de los hombres. Sin embargo, sólo quien no recuerda aquel Corazón materno que, junto al Corazón dulcísimo del Hijo Jesús, latió siempre con el amor más tierno, puede pensar y decir esto. La piedad del Inmaculado Corazón de María es en cierto sentido infinita, por esa cierta infinitud que deriva de la consanguinidad con Dios a la gran Madre de Dios, según enseña el Doctor angélico; y el melifluo Doctor llama cariñosamente el alma de la Santísima Virgen María.
Así pues, como mientras el mundo se enfriaba, era necesario reavivar de nuevo el fuego del cielo, Nos mismos en la Fiesta de la Inmaculada Concepción de la Virgen, en el año 1942, quisimos consagrar perpetuamente la humanidad al Inmaculado Corazón de María.
Desde entonces, con mayor confianza, los fieles de todo el mundo comenzaron a acercarse al trono de la Gracia y al mismo tiempo se manifestaba más ampliamente la ayuda misericordiosa de María.
De la abundancia y dulzura del Corazón materno también bebieron abundantemente los fieles de la diócesis de Xuzhou en China, que atribuyen al Inmaculado Corazón de María su seguridad de los peligros de la guerra y especialmente del asedio de los japoneses».
PAPA PÍO XII, Carta Apostólica “Novíssimo universárum”, poniendo la diócesis de Xuzhou (China) bajo patrocinio del Inmaculado Corazón de María, 1 de Junio de 1947. Acta Apostólicæ Sedis 40 (1948), 492-493 (Fragmento).
Papa Pío IX en 1947, JAJAJAJAJAJAJA YA LO DECIA MI ABUELA CATOLICO IGNORANTE SEGURO SEDEVACANTE
ResponderEliminarTanta burla por una errata, y vos, gran hijueputa, que ni siquiera sos católico (más bien un imbécil mamerto imberbe y hasta mangina que no la pone ni con tusi mezclado con fenta y GHB) dándole el lado a los herejes. Sábete una cosa, tu abuela, tu madre, tu mujer y hasta tu papá me valen un soberano cerro.
EliminarTu abuela ni siquiera se aprendió el Astete de primera comunión, así que ¿qué va ella a saber si existe el sedevacantismo? Más bien, asqueroso, el odio al sedevacantismo lo tienes es porque alguna vez lo fuiste y luego, por ignorantón, volviste atrás al Vaticano II como el perro al vómito. Y el frenopático más bien búscalo para ti, porque las personalidades múltiples no son de persona normal.
Eliminar