LOS OBISPONES PANAMEÑOS, SIGUIENDO EL CAMINO DE COSTA RICA

Los obispones de Panamá con los ornamentos pedófilos de la JMJ 2019.

La Conferencia Episcopal Panameña, el 14 de Septiembre, expidió el siguiente comunicado:

   

   

TRANSCRIPCIÓN

CONFERENCIA EPISCOPAL PANAMEÑA

    

Apartado 0823-00917

Panamá, República de Panamá

   

COMUNICADO AL PUEBLO DE DIOS SOBRE LAS ACTIVIDADES DE LA FRATERNIDAD SAN PÍO X

   

Los obispos de la Conferencia Episcopal Panameña considerando que “tienen [sic] obligación de defender la unidad de la Iglesia universal, el Obispo debe promover la disciplina que es común a toda la Iglesia, y por tanto exigir el cumplimiento de todas las leyes eclesiásticas” (Canon 392).

      

Notificamos al Pueblo de Dios que la Fraternidad Sacerdotal San Pío X (FSSPX), fundada en 1970 por Monseñor Marcel Lefebvre, no está en plena comunión con la Iglesia Católica; por lo que los fieles católicos deben abstenerse de asistir a sus cultos. En cuanto a los sacramentos que se administren en sus cultos, se le recuerda a los fieles que para administrar sacramentos se requiere la aprobación del Obispo o de la Autoridad Eclesial; y al no contar con la misma, estos son ilícitos.

  

En cuanto a la celebración de la Misa en latín comunicamos que no está prohibida en la Iglesia Católica; pero debe ser aprobada por los Obispos (Traditionis Custodes, Art.2) y el uso del Vetus Ordo (Misa en latín que se celebraba antes del Concilio Vaticano II) solo puede ser autorizada por la Santa Sede.

   

En relación a los Lugares Sagrados y Lugares de Oración, recodamos [sic] que “La dedicación de un lugar corresponde al Obispo diocesano y a aquellos que se le equiparan por el derecho” (Canon 1206 y 1224); por lo que está prohibida la celebración de Sacramentos en lugares no autorizados por el Obispo.

   

Hacemos un llamado a todos los fieles católicos, a valorar la riqueza de la Liturgia actual, enriquecida por la expresión del Pueblo de Dios, a través de su propia lengua, como lo solicitaron los Padres Conciliares en el Concilio Vaticano II y como la Iglesia Universal celebra todos los días en todo el mundo.

  

Panamá, 14 de septiembre de 2023.

  

(Fdo.) Rafael Valdivieso Miranda

Obispo de Chitré

Presidente de la C.E.P.

   

(Fdo.) Cardenal José Luis Lacunza M., O.A.R.

Obispo de David

   

(Fdo.) Pedro Hernández Cantarero, C.M.F.

Obispo del Vicariato Apostólico de Darién

Vicepresidente de la C.E.P.

   

(Fdo.) Manuel Ochogavía Barahona, O.S.A.

Obispo de Colón ‐ Kuna Yala

Secretario General de la C.E.P.

   

(Fdo.) José Domingo Ulloa M., O.S.A.

Arzobispo Metropolitano de Panamá

   

www.iglesia.org.pa | 317-1800 / 317-1801

Clayton, calle Carr. (Segunda después de la Caja de Seguro Social

Resalta la estupidez de los obispones de Panamá (que siguen el ejemplo de su vecino ultraliberal Costa Rica) de equiparar en este documento (cuya mala redacción, falta de desarrollo argumentativo, desinformación y/o mendacidad absoluta solo traslucen el odio y mala fe del arzobispón panamense José Domingo Ulloa Mendieta OSA, que desde su primer día le ha hecho la guerra a la FSSPX) la «Misa en latín» con «Vetus Ordo», cuando incluso las traducciones de la 3.ª edición típica del Misal modernista tienen un aparte con el Ordinario en latín. Ítem, la única «riqueza» del Novus Ordo es en herejías, blasfemias, improvisaciones y abusos litúrgicos inherentes a él, y el año pasado, en suelo panameño, hubo un ritual maya en la Casa de Retiro Espiritual “Monte Alverna”, transmitido PRECISAMENTE POR LA CONFERENCIA EPISCOPAL PANAMEÑA.

   

Como se dijo, hay «desinformación y/o mendacidad absoluta» porque la FSSPX no está en cisma con el Vaticano (el mismo Vitus Huonder mencionó que Francisco Bergoglio le había dicho «la FSSPX no es cismática», y hasta el momento de cierre de este artículo, NO LO HAN DESMENTIDO), y el mismo Bergoglio les ha reconocido potestad jurisdiccional para confesar, presenciar –a medias– matrimonios, y conocer en primera instancia de causas canónicas. Pero esto no necesariamente significa que sea algo bueno, porque ni la Fraternidad ni el Vaticano tienen la misma eclesiología (ni mucho menos eclesiología católica): esta habla que hay «dos Romas en una sola»; aquel de «grados de comunión eclesial». Conciliarlas es imposible y absurdo.

  

De otra parte, el cambio del latín al vernáculo en la liturgia no estuvo en consideración por Juan XXIII Roncalli (quien muy por el contrario, en su constitución “Véterum Sapiéntia”, citando la Carta Apostólica “Offciorum omnium” de Pío XI –1 de Agosto de 1922–, dice «De hecho la Iglesia, al abrazar en su seno a todas las naciones, y estando destinada durar hasta el fin de los siglos, exige por su misma naturaleza una lengua universal, inmutable y no popular»); y en Sacrosánctum Concílium, art. 36. § 1 dice: «Se conservará el uso de la lengua latina en los ritos latinos, salvo derecho particular» (aunque en los párrafos siguientes introducen el vernáculo según considere la autoridad local). Solo Montini y Bugnini fueron los que impusieron a la cañona el uso del vernáculo (aparte de los demás cambios litúrgicos), y aun así, las traducciones de la 3.ª edición típica del Misal modernista tienen un aparte con el Ordinario en latín.

   

Y como también hay que mirar a quién, repasemos una de las gestas de José Domingo Ulloa Mendieta OSA, arzobispón de Ciudad de Panamá y segundo vicepresidente del CELAM, en plena covidhisteria, se prestó para el ridículo de una coreografía con la canción “Jerusalema”:

  

    

Por supuesto, ese comunicado (que da risa el que no sale en la página oficial ni en las redes sociales de la Conferencia Episcopal Panameña) no vale el papel en que se imprimió ni los bytes de su digitalización.