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martes, 26 de julio de 2022

AGUANDO LA “MISA” MODERNISTA

Mientras Francisco Bergoglio iniciaba su gira de disculpas en Canadá, luciendo un tocado de plumas y siendo ahumado por los indígenas locales, un presbítero italiano decidió simular el servicio dominical en la playa, en bañador y usando un colchón hinchable como “altar”, superando con creces a otros casos de “misas” en el agua.
   
El presbítero Mattia Bernasconi (“instalado” el 7 de Junio de 2014), vicario de pastoral juvenil de la parroquia San Luis Gonzaga de Milán, había partido con un grupo de jóvenes para un “Campamento de la legalidad” organizado por la asociación antimafia Libera. Y el domingo 24 de Julio, en que terminaba el campamento que habían realizado en terrenos confiscados al clan Arena de la ‘Ndrangheta (la mafia calabresa) en Isola Capo Rizzuto, celebró en medio del mar Jónico en la playa de Alfieri-Scifo, cerca a la ciudad de Crotona.  
  
Bernasconi contó a un medio local sobre el origen de la idea: «Habíamos escogido un bosque de pinos para acampar, pero estaba ocupado. Hacía mucho calor, y así nos dijimos: “¿por qué no hacer la misa en el agua?”. Una familia nos oyó hablar, e hizo disponible su colchón hinchable, el cual transformamos en un altar. Fue hermoso, aun cuando nos quemamos».
  

Durante la homilía, Bernasconi observó que el agua estaba agitada mientras nadaban, pero se calmó [¿milagrosamente?] tanto durante la celebración que podían ver sus propios pies y los peces que nadaban alrededor: «El agua del mar que antes estaba agitada y ahora está tan límpida es como nuestra experiencia que, a través del trabajo con Libera y el encuentro con las personas nos ha permitido ver las cosas más claras. La reflexión es sobre lo que queremos hacer ahora que volvamos a casa: ¿comprometernos más por la legalidad y el respeto, o dejar las cosas como están?», dijo.
  
Con todo, la curia archidiocesana de Crotona-Santa Severina expidió ayer un comunicado en que, si bien agradece la elección de su territorio para el campamento, recuerda (citando la reciente carta bergogliana “Desidério desiderávi”) que aun en retiros o encuentros con jóvenes, «es necesario mantener el mínimo de decoro y de atención a los símbolos requeridos por la naturaleza misma de las celebraciones litúrgicas» [ACTUALIZACIÓN (18 de Agosto): El arzobispón milanés Mario Enrico Delpini Caruggi, superior de Bernasconi, publicó un comunicando diciendo que este deberá «retomar seriamente una formación litúrgica que le permita entender cómo fue posible este comportamiento y evitar que se repita», informó el diario Il Giorno].
  
Ante este episodio, solo se confirma que el Novus Ordo Missæ (en este caso, en el rito ambrosiano alterado en 1976), «la única expresión de la lex orándi» de la Secta Deuterovaticana, es un maldito chiste, y sus rúbricas son un saludo a la bandera. Y ya que los modernistas siempre piden saber «discernir los signos de los tiempos a la luz de la fe» (Plegaria Eucarística III para diversas necesidades “Jesús, camino hacia el Padre”), y consideran las noticias cual fuente de revelación, ¿no significará esto que su liturgia, como su secta, están haciendo agua?

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+Jorge de la Compasión (Autor del blog)

Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)