El presbítero indonesio Lorenzo Heli OFM Cap., aparentemente “bendijo” una “boda canina” (derecha), causando ira en redes sociales.
Los perros “Jojo” y “Luna”, de la raza malamut de Alaska, posaron en traje de bodas en un centro comercial del exclusivo sector Pantai Indah Kapuk (en chino 潘泰因达卡普克), al norte de la capital Yakarta, durante la celebración de sus cumpleaños (de ellos) el pasado viernes 14 de Julio.
El presbítero Lorenzo Heli, párroco de San Francisco de Asís en Tebet, al sur de Yakarta, tuvo que aclarar la situación diciendo que lo que hubo durante los cinco minutos que estuvo en el centro comercial fue una simple “bendición de mascotas” propia del ritual franciscano, y que también “bendijo” a otros diez caninos que estaban en el lugar, pero que no se quedó para la segunda parte del evento.
A la “bendición/boda” siguió la recepción de “Jojo” y “Luna”, que lucieron en esta oportunidad trajes tradicionales de la isla de Java, con un cortejo nupcial y costosos regalos, circunstancia que provocó enfado y amenazas de demandas contra Valentine “Valen” Chandra e Indira “Nena” Ratnasari, propietarias de los respectivos perros.
Las protagonistas (humanas) de la polémica tuvieron que convocar una rueda de prensa el 19 de Julio para ofrecer disculpas públicas: «Lo lamentamos mucho y queremos disculparnos con los entusiastas de la cultura javanesa y con todos los indonesios que estuvieron incómodos y heridos por el evento. No tuvimos la intención de insultar la cultura indonesia y la cultura javanesa. También estamos muy agradecidos por que se nos recuerde nuevamente que debemos comprender mejor la cultura», dijo Ratnasari.
Por su parte, Chandra se disculpó con la Archidiócesis de Yakarta, el presbítero Lorenzo Heli y los católicos indonesios por «la noticia, que fue malinterpretada por el público. En realidad, lo que sucedió fue solo una bendición de mascotas o animales que generalmente se realiza en la iglesia».
La fiesta tuvo otro elemento de crítica, toda vez que tuvo un coste de 200 millones de rupias indonesias (13.290,80 dólares estadounidenses; 11.943,10 euros), cifra escandalosa teniendo en cuenta el salario mínimo de 4,9 millones de rupias indonesias (325,65 dólares; 292,60 euros), y que el 10% de la población de Indonesia vive por debajo de la línea de pobreza. Agréguese a esto que Ratnasari es una funcionaria de la oficina de la Presidencia de Indonesia, y que el presidente Joko Widodo recomendó a sus funcionarios el pasado mes de Marzo que no presumieran su estilo de vida en forma “impropia”, especialmente en redes sociales.
Por su parte, el ambientalista Singky Soewadji, coordinador de la Alianza de amantes de la vida silvestre indonesia (APECSI en indonesio), dijo: «Estrictamente, esto es un insulto a las costumbres y la religión, tanto a las costumbres javanesas como al catolicismo. Como observador de animales a quien también le gustan los perros y tiene su propio perro, y una vez fue presidente de East Java Perkin (Asociación de Kinología de Indonesia), lamento profundamente este incidente y apoyo que este caso se siga legalmente».
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Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)