Traducción del artículo publicado en 2019 por Johanna Salinas para PACIFIC ISLAND TIMES (Isla de Guam). Salvo la primera, las imágenes proceden de OSSERVATORIO SUL CAMMINO NEOCATECUMENALE SECONDO VERITÀ. Comentario propio.
DESMITIFICAR ‘EL CAMINO’
El Camino inspira compromiso, y desencadena controversias.
Balbina Terlaje, de 85 años, estuvo entre los miembros pioneros del Camino Neocatecumenal en Guam cuando el movimiento evangélico, también conocido como “El Camino”, fue introducido a la isla a finales de la década de 1990. «El CNC nos dijo que abriéramos la Biblia para que encontráramos la paz con nosotros mismos» dijo Terlaje.
Terlaje se unió a su grupo CNC en un peregrinación a Jerusalén, donde vieron al fundador del CNC, Kiko Argüello. «Durante la ceremonia, tuvimos que ir con el arzobispo (Anthony) Apuron y ser escrutados», dijo. El escrutinio involucró declarar todos sus pecados a Apuron y la congregación. «Me arrodillé ante él, y él dijo que no podía salir del CNC».
Pero la presión se hizo demasiado estresante para Terlaje. «Cada vez que el CNC tenía un evento, yo tenía que estar ahí. Cuando mi esposo estuvo en cama, tenía que dejarlo para atender la convivencia».
Terlaje finalmente dejó el movimiento.
Para quienes buscan progreso espiritual, cualquier alternativa puede ser atractiva. Por eso, el CNC, un carisma con sus propios rituales y retiros, solía atraer seguidores.
Pero el mismo CNC es una fuente de incomodidad para la misma Iglesia Católica. Los críticos rechazan al CNC como una secta, alegando que se aprovecha de sus miembros. Algunos citan el fanatismo y la obediencias ciega que el CNC presuntamente construye, mientras que otros objetan sus doctrinas y prácticas litúrgicas heterodoxas.
Cuando ella aún era miembro, Terlaje asistió a un retiro de fin de semana del CNC en un hotel. «Cuando ellos pasaron una bolsa de basura para donaciones para pagar la comida y la sala de banquetes, puse 100 dólares. Pocos minutos después, contaron todas las donaciones y dijeron que no era suficiente. Ellos pasaron la bolsa de basura nuevamente cinco o seis veces», dijo Terlaje.
Aunque el retiro que presionó por las donaciones había sido incómodo para Terlaje, ella todavía creía que el grupo tenía buenas intenciones.
Tener que dividir su tiempo entre su religión y su esposo, Terlaje enfrentó juicio de sus compañeros neocatecumenales. «Ellos me decían que no podía dejar el CNC porque ya había sido escrutinizada», dijo.
El colmo para Terlaje fue cuando un presbítero insultó a su familia en una misa. «Mi nieta bebé estaba llorando durante la misa y no podía parar. Entonces, el padre Rudy (Arejola) detuvo la homilía y dijo que no podía hablar porque había una distracción en la sala», relató. «Mi hijo estaba tocando la guitarra en la banda se levantó y cargó a la bebé. Él les dijo que su hija tenía un nombre y no era ‘distracción’».
El CNC había reunido 700 miembros locales desde que el joven movimiento evangélico fue introducido en Guam en 1998. El 8 de Diciembre de 1999, el arzobispo Anthony Apuron estableció el Seminario Misionero Archidiocesano Redemptóris Mater. Para su décimo aniversario en Guam en 2008, el SRM recibió una resolución legislativa, elogiando la institución por su labor evangélica en Guam.
El Camino Neocatecumenal gozó una existencia pacífica en Guam sin atraer atenciones punzantes hasta que la propiedad del SRM [el inmueble donde estaba el seminario Redemptóris Mater, N. del T.] en Yona apareció en un escándalo abismal en 2013. Subsecuentemente, el CNC atrajo la curiosidad de la comunidad, causó descontento y devino sujeto de escrutinio.
«El primer neocatecumenal que vino a Guam fue Pius (Sammut OCD); él halló que Apuron era un arzobispo dispuesto, disponible a cualquier cosa y lo convenció para participar en la segunda comunidad en Agaña», dijo David Sablan, presidente de Concerned Catholics de Guam.
Anthony “Tony” Sablan Apuron celebrando una “uka” (liturgia neocatecumenal) en el otrora kiko-seminario de Yona (c. 2014)
Sablan especuló que el CNC ha manipulado al arzobispo para transferir la propiedad de Yona. Decenas de presbíteros del CNC fueron ordenados por el SRM antes de ser cerrado en 2017.
El CNC fue fundado en Madrid en 1964 por Kiko Argüello y Carmen Hernández. Agresivamente misionero, el movimiento ofrece formación post-bautismal a los católicos que buscan profundizar su fe más allá del ritual de ir a la Misa dominical. Sus seguidores ven al Neocatecumenado como nueva evangelización en acción. La Santa Sede dio su aprobación final al Camino Neocatecumenal en Enero de 2012 [Después de la aprobación provisional en 2002, el Estatuto fue aprobado por el entonces Pontificio Consejo para los Laicos en 2008, en el 2012 hubo la tentativa de autoaprobar su liturgia concluyó con la aprobación solo de «las ceremonias extralitúrgicas que marcan las etapas catequéticas del Camino», que sin embargo continúan despedazando las conciencias, N. del T.].
El CNC toma un enfoque más íntimo a la evangelización. Se enfoca en el trabajo espiritual en grupos pequeños, organizados en comunidades de base parroquial de 20 a 50 personas. El Neocatecumenado afirma tener más de un millón de seguidores en 124 naciones, con alrededor de 2.000 presbíteros operando en alrededor de 100 seminarios. Su éxito fenomenal creó un efecto de polarización; ganando simpatizantes y detractores en igual medida [Los únicos simpatizantes son sus miembros, y los detractores (a quienes llaman “Faraón”) son todos los demás, N. del T.].
Carmen Kasperbauer, de 84 años, quedó desconcertada cuando miembros de su famila dijeron que no podían dejar el CNC después que Apuron los escrutinizara. «Es como si ellos fueran forzados a hacer confesión pública y si dejan el CNC, el grupo conocerá todos sus secretos. El pecado es íntimo y está bien compartirlo para crecer. Pero, si quiero confesarlo, quiero que quede solo entre mi persona y el sacerdote, y no que quede en manos de cualquier otra persona para escandalizarme».
Kasperbauer dijo que durante un encuentro familiar, un joven pariente mencionó que el CNC quería que les donase su tierra a ellos: «Él dijo que Dios no quería que él tuviese cosas materiales. Yo le dije que mi familia Artero poseía un terreno en Andersen antes de la guerra. Mi padre me sentó en la playa de Apoto para decirme que esta era la tierra de mi abuelo, pero ahora era su tierra. Entonces mi padre me dijo que esa ya no era su tierra y que ahora esa era mi tierra. Mi padre me dijo que nuestra tierra era para nuestros hijos, para que no estuviesen desprotegidos en nuestra cultura. Le dije a ese joven que él le debía su tierra a sus hijos futuros».
El encuentro más extraño de Kasperbauer con el CNC fue en una misa en la catedral. «El presbítero le permitió a un Neo [nombre con el que se conoce a los neocatecumenales en Guam, N. del T.] hacer una confesión pública después de la comunión», dijo. “Fue inapropiado, porque después de la comunión, solo queremos ser uno con Cristo, pero este tío solo quería hablar a la congregacióm sobre su experiencia en la Guerra de Vietnam, su consumo de drogas y todas las mujeres con que tuvo relaciones sexuales. Los padres de familia cubrían los oídos de sus hijos, y algunas familias simplemente se levantaban y se iban. Tuvieron que volver a la misa siguiente para la bendición final».
A pesar de sus malas experiencias con miembros del CNC, Kasperbauer ve méritos en el movimiento. «Hay muchas cosas buenas que hicieron por muchas personas, como enseñarles la Biblia y el camino de Dios, y mantener unidas las parejas. La doctrina de Cristo es buena, pero ellos están haciendo daño a las familias y a nuestra cultura. Justo ahora, están tratando de subyugar la forma de decir la Misa», dijo.
Los fieles católicos “tradicionales” acusan al CNC de tratar deshonestamente con la doctrina y las prácticas litúrgicas de la Iglesia.
Tony Palacios, un crítico del grupo, afirmó que el CNC cambió el horario de misas de su parroquia, lo cual afectó la misa en idioma chamorro. A pesar de ayudar a recoger 36.000 dólares para renovar la capilla de Santa Ana, ya no se siente cómodo estando en su nueva parroquia [actualmente kikianizada con dinero católico, N. del T.]. «La gente de Agat ahora va a diferentes parroquias en Santa Rita o Piti, por los neos. Yo no estoy contra los neos porque tengo parientes y amigos en el grupo. Pero es como si el CNC estuviera tratando de dividir la Iglesia».
A pesar de las críticas, los miembros devotos del CNC siguen orgullosos de su comunidad. «El CNC me dio algo coherente y estructurado. Algunas personas pueden haber dejado el CNC porque encontraron difícil ser coherentes», dijo una miembro actual, que requirió anonimato [Si estás orgulloso de algo o de alguien, ¿para qué quieres anonimato si te piden opinión al respecto? A ese cuento le falta un pedazo, N. del T.]. «Esto no es una secta. Nadie me forzó a unirme. Puedo dejarlo cuando quiera. La gente deja el CNC por su propia voluntad, no echamos a nadie a menos que sea un pedófilo o un abusador. No somos una organización malvada. Es una comunidad para aquellos que comparten sus creencias en Dios y en la escritura. Nosotros estudiamos la escritura y compartimos nuestras historias».
Ella está dedicada a su fe a pesar de la desconfianza que muchos puedan sentir hacia el CNC. «Las personas que no conocen, nos juzgan [La típica argumentación sectaria: «Somos perseguidos por gente que no conoce nuestras creencias», N. del T.]. La gente dice que estamos encubriendo a Apuron, pero el CNC ha estado más tiempo aquí que él. No puedo decir nada sobre Apuron [condenado canónicamente por Francisco Bergoglio en Marzo de 2018 (más de un año antes de este artículo) a privación de la dignidad, oficio e insignias episcopales, y extrañamiento de Guam. En la justicia seglar, la causa está en curso en el marco del proceso de bancarrota de la archidiócesis de Agaña, aunque la jueza Frances Marie Tydingco-Gatewood del Tribunal de Distrito de Guam rechazó una de las demandas citando la Ley de Inmunidad de Soberanos extranjeros de 1976 y el fallo Robles Vs. Santa Sede del Tribunal del Distrito Sur de Nueva York, N. del T.], pero su estadía en el CNC es su problema. Yo no puedo juzgarlo», dijo.
Aunque el CNC pueda estar perdiendo miembros, ella tiene sus propias teorías sobre por qué se fueron: «Algunas personas hacen cosas malas y simplemente no quieren oír que tienen que cambiar. Todo cuanto se dice es confidencial. No se supone que nadie hable de ello fuera de las sesiones. Eso sería un pecado», explicó.
Ella compara las reuniones del CNC con las lecciones de la Cofradía de la Doctrina Cristiana para adultos. «Siempre he ido a misa, así que conozco a Dios, Jesús y la Trinidad. Necesitaba estar junto a otras personas. Aprendí a profundizar en mi fe y en la religión. Todos estamos en etapas diferentes de nuestras vidas, así que puede que no todos estemos en el mismo canal. A fin de entender la esencia de esto, es necesario estar en el CNC» [También se puede decir legítimamente: «Habiendo sabido qué es REALMENTE el CNC, se salen del Camino», N. del T.].
Otra miembro actual en Sinajana dijo estar agradecida por su despertar espiritual con el CNC: «Estaba en búsqueda por un tiempo. El CNC ayudó a hallar la paz conmigo misma y mi fe personal. Aun si pasamos horas en preparacióm y servicio, oír la palabra me ha dado autopropósito en todos los pasos de la vida. No importa cuánto tiempo he estado fuera del catolicismo, esa comunidad es una familia y ellos nunca me abandonan. Ansío que mis hermanos y hermanas fortalezcan y afirmen mi creencia», dijo [Queridita, no esperes de ellos esa misma «fortaleza y afirmación» el día que ellos digan «Todavía conservas tus ídolos» porque no des todo lo que te piden, o te traten de “higo seco” por no dar los frutos que quieren, N. del T.].
Ella no alberga resenentimientos hacia exmiembros del CNC, sin importar el camino que han elegido: «Cuando las personas abandonan el CNC, es porque hay problemas con la familia y los amigos que no entienden El Camino. Ellos no están de acuerdo con que los neocatecúmenos pasen tantas horas lejos de casa aprendiendo de la Biblia y la palabra de Dios. El padre Gus [Agustín Aguon Gumataotao OFM Cap., fallecido el 12 de Febrero de 2021, N. del T.] admiraba las horas que los neocatecúmenos dedican a Dios, porque muchos católicos ni siquiera pasan una hora a la semana en misa», dijo (Con informes adicionales de Mar-Vic Cagurangan).
COMENTARIO: «El CNC nos dijo que abriéramos la Biblia», como hacen las sectas protestantes, que predican el inmanentismo y el libre examen. Una secta, porque ellos dicen: «nos “persiguen” porque no nos conocen», y «para conocer la esencia del Camino, hay que experimentarlo»; hablan palabras bonitas para atraer a los externos, pero que ya dentro manda dejar todos los bienes porque «Dios [= El Camino] lo quiere». Una secta que dice de sus “clérigos” abusadores y/o encubridores (Anthony Sablan Apuron OFM Cap., José Luis del Palacio y Pérez-Medel, Víctor Guerrero Timaná, Luis Camacho, Antonio Lax Zapata, Elvin Taveras Durán, Ángel Arturo Vásquez Urízar, entre otros): «no sabemos nada, si hizo El Camino, es su problema», pero les acepta que den la moralina en sus escrutinios, y les manda hacer “confesión” pública incluso en la catedral, sin importar si hay niños o personas impresionables allí que puedan ser escandalizadas, o que está expuesto el que creen es “el Santísimo” (igual, ellos no creen en la Transustanciación ni tampoco la tienen).
Por su interés, les dejo esto:
ResponderEliminarhttps://youtu.be/oKKH6QgVvrI
Ignominiosa profanación de la Basílica del Pilar de Zaragoza (España). Un abominable espectáculo, con unas horribles imitaciones de Andrew Lloyd Webber, digno de una discoteca barata.
Un saludo