«Los jesuitas continuaron con su acostumbrado celo la obra comenzada por San Francisco Javier, y no tardaron algunos en regar con su sangre aquel campo. Ya en 1549 habían alanceado y luego degollado los
paganos de la Costa de los Pescadores a Antonio Criminali, natural de
Parma; por aquel tiempo envenenaron los mahometanos de Ambón al
portugués Muño Ribera, y en 1552 fue decapitado Luis Méndez en el
Cabo de Comorín (Kanyakumari). Otros dos misioneros murieron en 1554 en la isla de
Salsette, cerca de Bombay, apedreados por los idólatras [1]. No obstante,
el cristianismo se fue extendiendo por la gran Península y perfeccionándose la organización eclesiástica. El 4 de Febrero de 1557 fue erigida Goa en silla metropolitana, con las diócesis sufragáneas de Malaca y
de Cochín [2]. Creáronse después los obispados de Macao en 1576 para
China, de Cranganore en 1600, y de Santo Tomás de Milapore en 1606.
Paulo V elevó en 1616 a arzobispado la silla de Cranganore. Al Rey de
Portugal se confirió el derecho de presentación para estas sillas. La
Iglesia índica tuvo un nuevo incremento con la adhesión de los nestorianos o cristianos de Santo Tomás a la comunión católica, realizada el
año 1599 en el Sínodo de Diamper [3].
[…] La institución brahmánica de las castas suscitó grandes dificultades a los misioneros, acrecentadas por la prohibición que envolvía de
comunicarse las clases superiores con las inferiores, y el soberano desprecio con que miraban aquellas a los parias y europeos [4]. Los primeros
misioneros franciscanos y jesuitas, no teniendo en cuenta esta circunstancia, habían anunciado la fe casi exclusivamente a las clases bajas.
Tal vez por esta razón no dio casi resultado la misión del P. Gonsalvo Fernández en Madurai. Este desdén con que las castas superiores miraron en un principio el cristianismo dio origen a un nuevo plan de
campaña.
El jesuita Roberto Nobili (de Nobílibus), descendiente de una familia noble romana, pasó en 1606, en compañía del provincial Alberto
Laerzio, de Malabar al reino de Madurai en la costa de Coromandel.
Resuelto a hacer desaparecer el hecho anómalo de que Jesucristo pasase entre los chatrías y brahmanes indios por un Dios de los parias, y creyendo necesario y justo anunciar también el Evangelio a dichas
clases superiores de la sociedad india, previa la autorización del Obispo
de Cranganor Francisco Ros, trabó íntimas relaciones con los brahmanes, vistió su
traje y adoptó su género de vida, renunciando también al uso de las
carnes y los peces; aprendió con alguna perfección las lenguas sánscrita y tamil; a, se sometió a las severas prácticas de penitencia de los saniassi o sanias (los que viven en continencia, nazareos), y al mismo tiempo que sostenía
disputas con los brahmanes, aparentó aceptar sus opiniones, evitando
todo trato con los sudras o parias. Sacando partido de una opinión corriente en la India, según la cual existieron antes allí cuatro caminos
para llegar a la posesión del Sumo Bien, o vías de verdad, uno de los
cuales se había perdido, sostuvo que él había ido para mostrarles ese
camino, que era el más recto de todos.
Los resultados justificaron la bondad del método, pues en 1609 había
convertido ya 70 brahmanes de Madurai. Por lo demás, procedió siempre con gran circunspección al explicar ciertas doctrinas y dar a los
dogmas cristianos expresiones adecuadas a la condición de los nuevos
neófitos, sobre todo cuando tenía que sustituir frases vulgares por otras
más elegantes: al mismo tiempo prohibió el uso de todo símbolo del
culto idolátrico, como la ceniza y otros. En poco tiempo se vio rodeado
Nobili de una comunidad numerosa de conversos; pero su sistema de
propaganda despertó recelos entre los franciscanos y aún entre los mismos jesuitas, por lo que fue preciso elevar una consulta a Roma obteniendo en 1621 y 1623 la aprobación explícita de Gregorio XV, y
más tarde se reconoció que era el único que allí podía dar positivos resultados.
El P. Nobili murió el 6 de Enero de 1656, sucediéndole Juan
de Britto, hijo de un virrey de la India, que nació en Lisboa el año 1641.
Bautizó muchos miles de idólatras; pero sufrió violentas persecuciones
y martirios, hasta que, por fin , pereció víctima de la venganza de una
mujer, el 4 de Febrero de 1693, siendo declarado beato el 18 de Mayo
de 1852 [5]».
[1] Müllbauer, Gcseh. dor kathol. Missionen in Östindien, Múnich 1851. Marschali, loc. cit. M. Tanner, Societas Jesu militans. Praga 1075 p. 21-2 sig. (acerca de los mártires de aquella región).
[2] Acerca de la creación de la provincia eclesiástica de Goa,
con su primer Arzobispo Gaspar, arcediano de Évora, por Pablo IV : Kajn. a.
1558 n. 22. O. Jlcjer. Propaganda 1 p. 255. 275. (N. 2). 355.
[3] Sobre los cristianos
de Santo Tomás, Ch. Swanston, Memoria de la Iglesia primitiva de Malayala
¡ Journal of tbe Asistió Society oí Great Brit. 1834.1-IV. Haug en la Gaceta Omr«wíde Augsburgo 1874, Suplemento N. 29. Thomassin.. 11.. 1 c. 24 n. 9.
[4] JOuvencv, Hist. S. J. P. V t. II L. 18 § 9 n. 1 sig. 49 sig. Giac. de Maestri,
Relazione della S.fede predícata daiPP.d. C. d. G. nella provincia Malabanca.
liorna 1681. 8. Fabio Ambr. Spinola S. J-, Vite del B. Cario Spinola martire.
Monza 1876.
[5] Acerca del P. Roberto Nobili véase: < Kath. Missionen » 1873 p. M
sigs. 45 sigs. 79 sigs. 95 sigs. G. Boero d. C. d. G. Vita del P. Giov. de Britto
Mart, Roma 1853. Prat. Vie du P. .lean de Britto. Par. 1853. Respecto de este período j del inmediato véanse además: Leftres edificantes et cuneuses. ecntes des
missions étrangéres par quelques Missionn. de la Comp.de J. París 1617 sig
voil. 34. Nouvelles Mémoires des Missions de la Comp. de J. dans le Levant. París
1715 voll 9-, las dos colecciones se hallan refundidas y aumentadas con el titulo
de Lettres edificantes. Par. 1780 sig. voll. 26. Gundermann, Allg Missionsatlas.
Gotha 1867.
http://cdigital.dgb.uanl.mx/la/1080014606_C/1080014610_T5/1080014610_MA.PDF
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