BENEFICIOS ESPIRITUALES DE LA MISA EN LÍNEA

Traducción del artículo publicado en TENÉTE TRADITIÓNES (Polonia).

   

Misa por el Domingo XV después de Pentecostés, presidida por Mons. Martín Dávila Gándara, superior de la Sociedad Sacerdotal Trento (templo de San Miguel Arcángel, Chihuahua, México – 5 de Septiembre de 2021)

    

PREGUNTA:  ¿Cuáles son los beneficios de ver una Misa Latina Tradicional en Internet? Sé que no obtendré el beneficio completo, tanto como estaría allí personalmente.

   

RESPUESTA:  Está claro, según las enseñanzas de los teólogos anteriores al Vaticano II sobre escuchar la Misa en la radio o la televisión, que no puedes cumplir con tu deber dominical viendo la Misa transmitida por Internet. La ley requiere estar  físicamente  presente en el Santo Sacrificio, o al menos ser parte de un grupo que realmente está presente (en el caso de una congregación tan grande que, por ejemplo, se derrama fuera de la puerta de la iglesia a la calle).

   

Por lo tanto, si pudieras estar físicamente presente en la Misa en circunstancias normales en un domingo o día santo, estarías obligado a asistir. En cambio, no puedes elegir quedarte en la casa pegado a tu computadora, o de hecho, quedarte en el estacionamiento de la iglesia, flotando sobre tu i-Phone, y aún así cumplir con tu obligación de asistir a misa.

    

De ahí la cuestión del deber.

    

Sin embargo, el beneficio espiritual de transmitir la Misa es otro asunto: tú puedes beneficiarse de ello. Esto se desprende del comentario del P. Francis Connell, un famoso teólogo moral de la Universidad Católica de América en la década de 1950, que planteó la cuestión de escuchar la Misa en la radio:

«Puedes participar en los beneficios de la Santa Misa sin presencia real, es decir, dirigiendo tu intención y devoción al rito sagrado. Al escuchar la Misa en la radio, sin duda se puede fortalecer la piedad y, por lo tanto, beneficiarse enormemente de la ofrenda del Santo Sacrificio. De hecho, es muy posible que quien participe así en el Santo Sacrificio se beneficiará mucho más que muchos de los presentes». (El Padre Connell responde preguntas morales. En American Ecclesiastical Review. Universidad Católica de América, Washington DC, 1959, págs. 75–76)

  

Entonces, en esta época, cuando verdaderos sacerdotes dicen Misas, los católicos pueden al menos consolarse al saber que el aspecto de la tecnología moderna, tan a menudo utilizada para el mal, también puede usarse para desarrollar su propia devoción, y de hecho, para llevarles los favores de la verdadera Misa dondequiera que se celebre.

Deo grátias!