Traducción del Comentario de los Padres de TRADITIO.
Los
dos están comprometidos, junto con otros secuaces, en un plan para
paganizar a fondo la Iglesia Conciliar por medio de un Sínodo General
“Vaticano IV” en 2023.
El
resultado será una iglesia conciiliar mucho peor que la que fabricaron
los revolucionarios protestantes: una falsía totalmente secularizada y
pagana.
Si eres un conciliar neocón, esto es, un neoconservador que le gusta la seminovusordiana Nueva Misa Latina “Extraordinaria”
de 1962 y alguna semblanza de la doctrina católica, como sobre el aborto
y la sodomía, Francisco Bergoglio ha indicado que es de la opinión de “excomulgarte” de su iglesia. Así lo expresó un íntimo de Bergoglio, el cardenal Joseph William Tobin Kerwin C.Ss.R de
Newark (Nueva Jersey), quien fue un protegido del cardenal sodomita
Theodore McCarrick, que ahora está en juicio por asalto sexual de
menores. Tobin también ha tenido acusaciones de asaltos sexuales a
menores elevados contra su archidiócesis.
El
11 de Enero de 2022, Tobin declaró que aquellos que no estuviesen de
acuerdo totalmente con el plan bergogliano para secularizar y paganizar
la Iglesia Conciliar por medio de un Sínodo General en 2023 (el cual
esencialmente es un “Vaticano I”) sean ahora vistos como herejes. Supuestamente, son sujetos a “excomunión”
por la Iglesia Conciliar del Nuevo Orden. El plan de Bergoglio ha sido
crecientemente criticado no como religión, dejando solo lo “Católico”, sino como una iniciativa política isquierdizta acostada en la jerga izquierdista radical secular, como “discernimiento”, y “espíritu” y “sinodalidad”. Ahora Jesucristo y la verdadera Iglesia Católica ya no son esenciales para la salvación sino el “proceso sinodal”, lo cual es mucho peor que la Revolución protestante. No abrazar esta Nueva Iglesia del Sínodo es visto como “herejía”.
Es el Anticoncilio Vaticano II una vez más, pero peor, si cabe. [Parte de la información para este Comentario proviene de la revista jesuita “America”].
El
cardenal Tobin es un conocido secuaz de Bergoglio. Así, sus palabras
indican claramente el siguiente paso en el plan conciliar para
deshacerse de todos los conciliares neocones que tienden al
tradicionalismo: quitarles sus presbíteros no sacerdotes (ya cumplido
en 1968), quitarles su take away their Half New
Order "Extraordinary" Mess of 1962 (ya cumplido en 1969), y ahora, para
el golpe triple, “excomulgarlos” como “herejes”.
Pero
nada de preocuparse. La historia eclesiástica nos enseña que todo esto
ha pasado antes, en más de una ocasión. El precedente más claro tuvo
lugar cuando los herejes arrianos del siglo IV, quienes habían tomado a
la Iglesia con su negación de Cristo como Dios, incluyendo a varios
papas y la mayoría de los obispos según San Jerónimo, “excomulgaron”
a los verdaderos Católicos y los Santos. Tomó un siglo o más, pero los
herejes fueron finalmente arrancados, y los verdaderos Católicos
retomaron la Iglesia.
La
diferencia entre entonces y ahora es que en el siglo IV los verdaderos
Católicos combatieron. Y esos luchadores fueron algunos de los mayores
Santos en la historia de la Iglesia: San Atanasio de Alejandría, San
Basilio el Grande, San Martín de Tours, San Agustín de Hipona, San
Ambrosio de Milán, y muchos más que son conmemorados en la Misa Latina
Tradicional. Hoy, los conciliares neoconseradores no tienen santos.
Ellos doblaron la rodilla ante el actual antipapa apóstata, Francisco
Bergoglio. Son pusilánimes, para usar una palabra de Nuestro Señor.
Ellos no pelean por la Fe Católica (si alguna vez la tuvieron). He aquí
por qué ellos serán destruidos en el corto plazo, mientras los Católicos
tradicionales, independientes de la apóstata y deuterovaticana Iglesia
Conciliar del Nuevo Orden, prevalecerán en el largo plazo.
Católicos
Tradicionales, la verdadera Iglesia Católica será reconstruida a partir
de las iglesias, capillas y oratorios Católicos Tradicionales
independientes alrededor del mundo que no reconocen a la herética
Iglesia del Nuevo Orden. La Iglesia Conciliar, fundada jurídicamente en
1964 durante el Anticoncilio Vaticano II
(1962-1965) para remplazar a la Iglesia Católica, es , según todas las
estadísticas, ahora está hundiéndose rápidamente, al borde de a
vancarrota según el Auditor Jefe del Vaticano, con su tan magra
asistencia a la “Nueva Misa” que en muchas diócesis, más de la mitad de sus templos existentes están siendo cerrados y demolidos.
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+Jorge de la Compasión (Autor del blog)
Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)