Noticia tomada de GLORIA NEWS.
El Ministerio de Educación francés dirigido por Édouard Jean Gabriel Geffray inició una serie de controles en las escuelas privadas católicas, llevados a cabo principalmente a finales de 2025, en un contexto marcado por el escándalo de abusos en el internado de Nuestra Señora de Bétharram (actual La Bella Rama, en dialecto gascón bearnés) entre 1950 y 2010.
El tema ganó atención nacional después de una audiencia parlamentaria de Guillaume Prévost (foto), Secretario General de la Educación Católica, celebrada el 2 de diciembre.
Prévost presentó la retroalimentación recopilada de directores de escuelas y maestros.
El 8 de diciembre, la Secretaría General de Educación Católica publicó un documento de 14 páginas que resume los incidentes. Entre ellos se incluyen:
- Interrogatorio intrusivo: Los inspectores hicieron preguntas intrusivas a los estudiantes jóvenes y al personal sobre sus creencias y prácticas religiosas, incluso sobre la asistencia a misa y la vida espiritual privada.
- Investigaciones y documentación: Los inspectores registraron las pertenencias de los alumnos, como las mochilas escolares, y examinaron o fotografiaron materiales privados, incluidos diarios o documentos espirituales.
- Interrogatorio de alumnos muy jóvenes: Los niños fueron interrogados sin la presencia de un adulto neutral.
- Socavando la identidad católica: Ciertas prácticas de inspección buscaban neutralizar la identidad católica de las escuelas. Los inspectores expresaron desconfianza hacia la expresión religiosa.
Además, los inspectores pidieron que se retiraran los signos religiosos.
Los testimonios recopilados describieron las inspecciones como «métodos abusivos, arbitrarios y generadores de ansiedad», en medio de «una sospecha sistemática hacia la identidad cristiana de los establecimientos». Los líderes católicos dijeron que los métodos tuvieron un impacto profundamente negativo en el personal de la escuela y agregaron estrés.
El tema recibió amplia cobertura en los medios de comunicación franceses, incluida la radio, los periódicos nacionales, las publicaciones religiosas y las agencias de prensa.
En respuesta, el Ministerio de Educación reconoció la publicación del informe. «Había tomado nota» de las acusaciones, y anunció el envío de instrucciones firmes a los rectores para recordar los límites legales de las inspecciones, como la exclusión cualquier interrogatorio destinado a conocer la confesión religiosa de los alumnos.
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+Jorge de la Compasión (Autor del blog)
Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)