Durante la procesión pública del Corpus Christi el 8 de Junio en la parroquia de los Santos José y Merardo de Lüdenscheid (Renania del Norte-Westfalia, Alemania), dos mujeres revestidas con velo humeral llevaron públicamente la custodia con el que creen que es el “Santísimo Sacramento”, informó Life Site News.
En las fotos publicadas en el sitio web de la parroquia, se ve que dos mujeres, identificadas como Marita Franzen y Sandra Ostermann y que desempeñan como “asistentes pastorales laicas” cargan el dorado ostensorio revestidas con velo humeral mientras la procesión discurría por las calles del pueblo, presentando el hecho como «un avance».
El presbítero Claus Optenhöfel, párroco de los Santos José y Merardo y que simuló el servicio Novus Ordo, dijo que había informado previamente del plan a su superior, el obispo Franz-Josef Overbeck, de Essen, justificándose en «la longitud del camino y el peso de la custodia», y diciendo que «en su investigación, el velo humeral no es un ornamento exclusivo de los ministros ordenados», y que por tanto no había falta canónica y litúrgica en ello (extremo que sin embargo fue desmentido por el portavoz diocesano), a pesar que:
- el canon 943 wojtyliano establece que el único «ministro de la exposición del santísimo Sacramento y de la bendición eucarística [es] el sacerdote o el diácono».
- el Ritual para la Sagrada Comunión y el culto de la Eucaristía fuera de la Misa (promulgado con el decreto Eucharistíæ Sacraméntum de la Congregación para el Culto Divino el 21 de Junio de 1973) dice en su numeral 76 que «el sacerdote que carga el Santísimo Sacramento [en la procesión] puede vestir los ornamentos usados para la celebración de la Misa si la procesión toma lugar inmediatamente después de esta, o puede vestir una capa pluvial blanca», implicando que solo los sacerdotes pueden llevar la custodia.
- la instrucción Redemptiónis Sacraméntum de la Congregación para el Culto Divino advierte en su numeral 153 que «nunca es lícito a los laicos asumir las funciones o las vestiduras del diácono o del sacerdote, u otras vestiduras similares».
- en las mismas fotos publicadas por la parroquia se observa la presencia de dos presbíteros (incluido el propio Optenhöfel), por lo que no podía alegar “falta de
sacerdotes”. O en últimas, haber hecho un recorrido más corto.
La parroquia de los Santos José y Merardo pertenece a la diócesis de Essen, cuyo ordinario Franz-Josef Overbeck es conocido de autos por su heterodoxia y heteropraxis. Como defensor del Synodalesweg alemán, ha dicho que la Iglesia debe «ampliar su entendimiento sobre la familia» (implicando la aceptación de la adopción por parejas homosexuales) y llamado por la “ordenación” de mujeres (incluso, él autorizó a 17 de ellas para que administrasen bautismos por un período de tres años, alegando “falta de sacerdotes”).
Lo bueno es que, al ser el Novus Ordo un rito inválido por alteración en la forma (las Palabras de la Consagración), materia (en algunos casos), e inidoneidad de los ministros (que no son sacerdotes ni obispos válidos), NO OPERA LA TRANSUBSTANCIACIÓN, por lo que en Lüdenscheid solo llevaron en procesión UN PAN VACÍO, sin más utilidad y valor que el usado en los servicios protestantes o el del Séder pascual judío.
Otra prueba adicional de que Nuestro Señor NO ESTÁ ALLÍ en el Novus Ordo, que es inválido y sacrílego.
ResponderEliminarPermítenos por favor republicar el artículo. De antemano, muchas gracias.
Muy inquietante!!
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