El sacerdote-presbítero (aunque cuesta reconocerlo por su uso de saco y corbata) y vaticanista español Antonio Pelayo Bombín, corresponsal de la cadena Antena 3 y de la revista marista Vida Nueva, fue denunciado por presunto acoso sexual contra un hombre de 40 años, informó Giulio de Santis en el diario italiano Corriere della Sera.
De acuerdo a lo publicado por De Santis, el hombre, periodista también, había denunciado ante la policía que Pelayo le hizo una propuesta indecorosa durante una cena al que este lo invitó en su domicilio en el centro histórico de Roma.
Aparentemente, los hechos habrían ocurrido entre la última enfermedad y muerte de Francisco Bergoglio y la elección de Roberto Francisco Riggitano-Prévost Martínez OSA como León XIV. Pelayo y el hoy denunciante suyo se conocieron en medio de su labor periodística e iniciaron una amistad, que llevó a un par de cenas en el piso de Pelayo.
La primera reunión, el 16 de Abril, transcurriría con normalidad, pero el incidente presuntamente ocurrió en la secunda cena el 23 de Mayo, refirió el denunciante. Tras rechazarle un vaso con whisky, el clérigo se le acercó excesivamente, a lo cual el otro periodista se marchó del lugar.
Pocos días después, el periodista presentó la denuncia ante la policía, y tuvo que trasladarse a otra ciudad por temor a reencontrarse con Pelayo, quien por distintos mensajes le ofreció disculpas por su comportamiento inapropiado.
Meses después de la denuncia, el Ministerio Público presentó cargos contra Antonio Pelayo Bombín por agresión sexual.
Nacido en Valladolid el 11 de Enero de 1944, Antonio Pelayo Bombín fue ordenado sacerdote el 2 de Febrero de 1968 con el Rito Romano Tradicional, y dos años después se graduó de Comunicaciones en la Escuela Oficial de Periodismo de Madrid. Desde 1986 se desempeña como corresponsal en Roma para Antena 3 (que compró el ya decadente Diario Ya luego de la venta por la Conferencia Episcopal Española a una filial de la Corporación de Medios de Comunicación Social “Comecosa”), COPE, Vida Nueva y otros medios españoles, y asesor religioso de la Embajada de España ante la Santa Sede. Durante su trayectoria ha acumulado distinciones como ser pregonero de la Semana Santa en su natal Valladolid y en Cuenca, el Premio del Club Internacional de Periodistas de Madrid, el premio “Calabria” de la Presidencia de la República Italiana, el premio “¡Bravo!” categoría especial de la CEE, el premio “Giuseppe de Carli” de la Asociación Cultural ídem, la condecoración “Cruz Fidélitas” del Arzobispado Castrense de España en grado Gran Cruz, y más recientemente el premio “Constantino Romero García” del Festival Nacional de Televisión Española en Vitoria.
Pelayo fue muy amigo de Bergoglio. En su último cumpleaños, este le regaló cinco botellas de vino argentino, y lamentó su muerte diciéndola a la presentadora Sonsoles Ónega Salcedo: «He perdido a un padre».
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Jorge Rondón Santos (Editor colaborador)